Katir rescata la tradición del 1.500
Mohamed Katir rescató la tradición del 1.500 con su bronce en los Mundiales, 23 años después del último podio español, el también bronce de Reyes Estévez en Sevilla 1999. En aquellos tiempos, y años antes, cuando se acercaba un gran campeonato de atletismo, la pregunta del aficionado era siempre la misma: “¿Cuándo es el 1.500?”. La admiración por esta prueba había surgido en los 80, cuando José Manuel Abascal y José Luis González rivalizaban con los mejores, y también entre ellos. Abascal se colgó un bronce olímpico, y González, una plata mundial. Luego irrumpió Fermín Cacho, el más grande. En aquella época, el mediofondo británico era brillante: Sebastian Coe, Steve Ovett, Steve Cram… Y fue precisamente Cram, en 1983, el último atleta de su país que había logrado el oro, antes de que Jake Wightman tomara el relevo en Eugene con una gran victoria sobre el fenómeno noruego Jakob Ingebrigtsen, en una carrera cósmica en la que los tres primeros bajaron de 3:30 minutos. Hasta la nacionalidad del campeón añade romanticismo al regreso del 1.500 a nuestras vidas.
Mo Katir no estuvo solo. Detrás se clasificó Mario García Romo con otra actuación estelar, con un marcón de 3:30.20 que rebajaba en cinco segundos su registro. Mario ha deslumbrado en la NCAA y ahora reclama su sitio internacional. También corrió Ignacio Fontes, más lejos, undécimo. Hacía 15 años que no había tres españoles en la final. Otro dato relevante. La carrera de Oregón ha ofrecido motivos para volver a ilusionarnos por el milqui. Es verdad que el horario de madrugada no ayudaba a engancharnos, pero este verano tendremos otra oportunidad en los Europeos de Múnich, que no serán una cuestión menor, una vez que los cinco primeros del mundo han sido atletas del continente. Katir ya ha dicho que quiere más. ¿Cuándo es el 1.500? El 18 de agosto. Reserven fecha.