Ganas de más

Ya ha terminado la incertidumbre del mercadeo de jugadores, del baile de porteros, de los equipos que quieren y no pueden como el Barça, de los que pueden y no quieren como el Real Madrid, el de los más listos como el Villarreal y el de los tapaditos como el Leganés.

Finalizada la cuarta jornada de Liga, a los que dicen que la Premier es la mejor liga del mundo, por jugadores y entrenadores, por el ambiente de fútbol tan especial, por los estadios llenos, por su “atractivo envoltorio”, les digo que se pongan el Villarreal-Celta. Eso sí que es fútbol: goles, ritmo, emoción… En definitiva, puro espectáculo. Con el parón de selecciones se nos cortan de golpe las ganas de saber cómo va arreglar Ancelotti su centro del campo, cada día con más bajas; quién ocupará definitivamente la dichosa posición de Busquets en el Barça de Flick; qué va a pasar con el Valencia, cuándo va a conseguir su primera victoria; hasta dónde va a llegar este Celta A madroa de Giráldez; cuándo empezará a picar La Araña, qué nos van a ofrecer Mbappé y Haller o si valdrá la pena la vuelta a LaLiga de James. Tengo que reconocer que me quedé con las ganas de ver a Hummels en la Real Sociedad o, mejor todavía, en Son Moix y a Chiesa en LaLiga

Echaré de menos a Merino, que cuando se recupere intentará hacer lo que Arteta quiere: liderar el centro del campo. Porque como dijo el entrenador español: “Los jugadores deciden dónde tienen que jugar y si fluyen en otra posición debes dejarles”. Menos mal que se queda por un año más Mamardashvili, un porterazo que concede menos goles de lo esperado, evitando alrededor de 0,3 por partido. Eso sí, para Arne Slot necesitará posicionarse más adelantado y contribuir a la construcción de las jugadas.

De momento, me quedo con el debut de Barry en La Cerámica, que de tierno no tiene nada. Lección de cómo enamorar a primera vista. El Villarreal ha fichado y ha dejado ir muy bien. Logan y Bernat van a subir el nivel de la línea defensiva y Sorloth será difícil que repita una temporada como la anterior. Lo que no acabo de entender es la cesión de Danjuma a un rival directo por Europa. Mientras dura el parón os invito a disfrutar del CD Castellón de Dick Schreuder y ya me contáis.