España aún tiene motivos para soñar

España llega a la Eurocopa de Inglaterra como una de las grandes candidatas para levantar su primer cetro continental. Por algo las de Jorge Vilda suman ya 852 días sin conocer la derrota, dos años y cuatro meses desde que perdió ante Estados Unidos en la She Believes Cup. Dos años de continuo crecimiento con esta Eurocopa como gran objetivo en el horizonte. Y ha llegado la hora de dar ese paso para, al menos, luchar por el título.

Estamos sin ningún tipo de dudas ante la mejor generación que el fútbol femenino español ha dado. Un equipo que aúna jugadoras contrastadas y curtidas en mil batallas como Irene Paredes, Leila, Mapi, Esther o Mariona con la generación que fue subcampeona del mundo comandada por Patri Guijarro, Aitana, Lucía u Ona Batlle más jóvenes que brillaron en ese torneo y ganaron el primer Mundial de fútbol femenino con la Sub-17 en 2018 como Claudia Pina. Lo mejor de las generaciones que más éxitos han dado a las categorías inferiores de La Roja está en Inglaterra.

Sin embargo, los focos se volvieron hacia Alexia. Es la tercera lesión de la lista inicial. Perdimos a Jenni Hermoso, segunda mejor jugadora del mundo, después la potencia y juventud de Salma y ahora la lesión en el cruzado de la Balón de Oro. Sin Alexia parece que la gloria no puede llegar, pero hay que confiar. Porque España fue subcampeona del mundo Sub-20 sin la de Mollet del Vallès en el campo. También tocó el cielo con la Sub-17, y tampoco estuvo Alexia. La del Barça es el faro del equipo, la goleadora, la que hace jugar y la que lidera sobre el césped. Es la referencia. Y su traumática ausencia invita al pesimismo. Pero sin ella, el resto tendrán que dar un paso delante. Y que nadie dude que esta Selección tiene capacidad para ganar con y sin Alexia...