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Esa segunda parte de Mbappé

La fatalidad, que llegó en forma de lesiones con Rodrygo, Lucas Vázquez y sobre todo Militao como protagonistas, no impidió que el Bernabéu se convirtiera en una fiesta en la segunda parte, ya con el resultado tan holgado y con Vinicius y Mbappé campando a sus anchas en campo contrario con un mar de metros por delante. Con el resultado tan asegurado sorprendió sobre todo la actitud de Mbappé, sus ganas. Se marcó unos minutos pletóricos, pidiendo constantemente el balón, intentándolo todo... Protagonizó también una galopada marca de la casa, de esas que le han convertido en un jugador único y que hasta ahora no se le habían visto en el Madrid. En definitiva y sin tener suerte de cara al gol, cambió los pitos que escuchó en el partido de Champions ante el Milan por aplausos. Y se escuchó un cántico repetido: “¡¡M-ba-ppé!!

Vinicius le dio al francés la banda izquierda en más de una ocasión para que se luciera en un ejercicio de generosidad que escasea entre las estrellas. Luego Ancelotti ayudó quitando a Vini para dar entrada a Endrick y, definitivamente, lanzar por la izquierda al francés. Pero nada. Se fue sin mojar en la ensalada de goles. Me da a mí que tampoco se acostó muy contento a pesar de la goleada. Porque necesita ser mucho más protagonista en este Madrid y lo sabe. Pero se ha topado con Vinicius que, de momento, lleva cuatro goles más que él. El Madrid salió de la crisis, él sigue sin ver la luz.

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