Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

El único rival de Pogacar es la historia

El domingo ciclista coronó a dos grandes campeones: Demi Vollering, ganadora de la última etapa en Valdesquí y de la general final de La Vuelta, y Tadej Pogacar, triunfador en el Santuario de Oropa y nueva maglia rosa del Giro de Italia. Dos resultados previstos, pero no por ello menos meritorios. Con Annemiek van Vleuten ya retirada, Vollering es la número uno del pelotón femenino. Sin Jonas Vingegaard en la lista de inscritos, nadie está a la altura de Pogacar en una gran vuelta. El ciclismo no son matemáticas. De hecho, es uno de los deportes más imprevisibles, porque hay que sortear factores peleados con la fortuna como las caídas, las averías y las enfermedades. Unos condicionantes que, por cierto, también se trabajan. Pero, si no hay nada raro en el camino, los más fuertes acaban siempre siendo los más fuertes. Vollering y Pogacar encarnan el ejemplo perfecto.

La meta de este domingo, Oropa, evocaba dos momentos históricos del Giro: cuando Piotr Ugrumov puso contra las cuerdas al entonces invencible Miguel Indurain en 1993 y cuando Marco Pantani se rehízo de una avería para conquistar la cima en 1999. Pogacar también tuvo un problema mecánico en la zona caliente, que además le provocó una caída, pero eso no impidió su primer zarpazo. No fue una remontada como aquella del ‘Pirata, ni mucho menos, pero va tan sobrado que pudo permitirse ese calentón extra sin apenas inmutarse. Curiosamente, el último ciclista que ha completado el doblete Giro-Tour en una misma temporada fue Pantani en 1998. Eddy Merckx, a quien tanto le comparan, lo consiguió tres veces. En total, solo siete ciclistas lo han hecho. El verdadero desafío de Pogi está en esos antecedentes. Tadej solo lucha contra la historia. Su único rival.

Normas