El mayor regalo es Griezmann
El Atlético derrotó al Valencia en un partido que decidió una genialidad del francés. Maravilloso su control y su gol. Sorloth volvió a correr, luchar cada balón como si fuera el último. Ambiente navideño y de fiesta en el Metropolitano.
Golazo. El partido ante el Valencia comenzó con una espectacular pancarta en uno de los fondos del estadio. “El mayor regalo”, se podía leer en la misma. Acompañada con un bonito mosaico. Un niño y una niña portaban una equipación del Atlético. Una mensaje bonito y muy navideño, muy acorde con las fechas que vamos a vivir. El mayor regalo es Griezmann. Marcó un golazo, un espectáculo. El control del francés a pase Pubill fue una maravilla. Y luego remató con una calidad que únicamente tienen los grandes futbolistas. Tener a Griezmann defendiendo la camiseta del Atlético es un lujo. Y Sorloth volvió a dar muestras de que es otro: corrió, luchó, peleó, se dejó el alma... Todo buenas noticias para el equipo de Simeone de cara a la segunda parte de la temporada. Tres puntos y el equipo del Cholo sigue en la parte alta de la tabla.
Animación. Lo mejor del encuentro fue la animación que hubo fuera del estadio. El tener un recinto como el del Metropolitano te permite hacer muchas cosas y hacer muchas actividades. El horario propició que muchos seguidores pudieran acercarse con antelación al estadio y disfrutar de la mañana. El fútbol se despide del estadio del Atlético hasta mitad de enero, cuando el equipo madrileño reciba al Alavés.
Ambiente. Luego, dentro del recinto, el ambiente fue un tanto frío en el inicio y los seguidores tardaron en entrar en calor. Hubo gorros navideños para todos los seguidores y la estampa fue muy típica de estas fechas. Pero el ambiente no fue el de otras ocasiones. Tampoco el equipo ayudó mucho a ello. Hubo un homenaje en el descanso a Robe Iniesta, fallecido estos días. Sonó una canción suya ante los aplausos de la grada. “Si te vas...”. Luego, en el segundo tiempo, y con el empate del Valencia, la gente ya sí se animó.
Fútbol. El Atlético tuvo poco fútbol. Quizá por el desgaste del encuentro de Champions ante el PSV. Los rojiblancos jugaron prácticamente andando durante el primer tiempo, aunque se marcharon por delante gracias al gol de Koke. Todo lejos de lo que suele suceder en el estadio del Atlético, donde los de Simeone le imprimen un ritmo alto a los partidos. Tras el 1-1, el equipo madrileño ya sí metió una marcha más al encuentro y fue el equipo intenso de siempre.
Soto Grado. Da pereza ver a Soto Grado sobre el campo. Mucha pereza. Es de esos colegiados que no deja contento a nadie. En un partido sin grandes complicaciones, siempre estuvo en el punto de mira de la afición del Atlético. Con su particular manera de enseñar tarjetas. Es lo que se ha ganado con sus arbitrajes al equipo rojiblanco. Lo dicho, qué grima da ver a este colegiado.
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Copa. El Atlético afronta ahora una eliminatoria de Copa de esas que podemos llamar trampa. El Atlético Baleares seguro que querrá hacer el partido de su vida y plantear batalla a los del Cholo. La Copa es una competición muy bonita, que gusta mucho a la hinchada del Atlético. Aunque es una etapa de regalos, seguro que el Atlético no querrá ninguna sorpresa.
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