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El mal inicio de curso presiona a Seoane

La temporada del Bayer Leverkusen ha arrancado mal. En todas las competiciones. En la DFB Pokal, el conjunto renano cayó en la primera ronda ante el Elversberg (4-3), un equipo recién ascendido a la tercera división. En la Bundesliga lleva sólo cuatro puntos tras seis jornadas (una victoria, un empate y cuatro derrotas). Y en la Champions perdió en el debut en el campo del Brujas (1-0). No extraña, pues, que la posición del técnico, el hispano-suizo Gerardo Seoane, esté en entredicho. Tras haber vivido siempre episodios de éxito desde que empezó a entrenar, Seoane, que ganó tres ligas con el Young Boys de Berna y alcanzó una meritoria tercera plaza con el Leverkusen la temporada pasada, se enfrenta ahora a una semana decisiva para su futuro. Tras el Atlético de Madrid, el sábado le tocará recibir al Werder Bremen en el último choque antes del parón.

Dos incorporaciones prometedoras

El mercado del Leverkusen no ha sido demasiado frenético. Se marchó Lucas Alario al Eintracht de Frankfurt y llegaron dos futbolistas jóvenes para la zona de tres cuartos de campo: el habilidoso mediapunta checo Adam Hlozek y el extremo inglés Callum Hudson-Odoi, que firmó su cesión procedente del Chelsea pocos días antes del cierre de mercado. El británico fue titular ya en Brujas y también en el empate de este fin de semana en Berlín ante el Hertha (2-2). Rápido, potente y encarador, Seoane necesita que tenga un impacto inmediato para poner freno a la mala dinámica de resultados. Las dos caras nuevas potencian una línea del campo en la que ya destacaba un Moussa Diaby que extrañamente aún no ha visto portería en lo que va de temporada.

La gran amenaza es Schick

El jugador más peligroso del Leverkusen es, sin lugar a dudas, el delantero centro checo Patrik Schick. En la pasada Bundesliga anotó 24 goles en 27 partidos, acabando por encima de Erling Haaland en la tabla de máximos realizadores y siendo superado sólo por Robert Lewandowski. Su arranque de temporada ha sido más discreto: lleva dos goles en las primeras seis jornadas de liga y también anotó un tanto en la debacle copera. Sin embargo, llega al partido habiendo afinado la puntería: su remate con la zurda en Berlín salvó un punto en el último partido y la jornada anterior se había estrenado en el torneo de la regularidad. Entre medias, sólo el nuevo fuera de juego semiautomático evitó que subiera al marcador un gol en Brujas que ya había celebrado. Su 1′91 de altura lo convierte en un jugador muy difícil de frenar por arriba, pero además posee una zancada poderosa para correr al espacio y es muy certero en el golpeo con la zurda.

Lesiones que pesan

Por supuesto, algo que hay que tener en cuenta a la hora de juzgar el inicio titubeante del Bayer 04 es la indisponibilidad de algunos de sus futbolistas más importantes en ataque. Florian Wirtz, la gran promesa de la institución, está fuera de los terrenos de juego desde el mes de marzo. Karim Bellarabi se lesionó en la primera jornada de liga y aún no ha vuelto. Y Amine Adli sólo ha podido jugar 29 minutos desde que arrancó el curso.