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El Madrid necesita un base

El Real Madrid se enfrenta este domingo al Joventut, en un tradicional choque del baloncesto español, después de encajar su primera derrota de la temporada, ante el Barça en la Euroliga. Y lo hace rodeado de informaciones que apuntan al fichaje de un base, una necesidad ya conocida, pero que se hizo más manifiesta el jueves en el Clásico. La dirección del juego pasa en estos momentos por las manos del Chacho Rodríguez, que tiene 36 años, y de Sergio Llull, base a tiempo parcial, que luce 35. Dos grandes talentos, sin duda, pero que parecen recursos insuficientes ante una temporada larga, y ante bases más físicos, como ocurrió en el Palau con Tomas Satoransky. En la plantilla están Nigel Williams-Goss y Carlos Alocén, ambos todavía lesionados, con peor perspectiva el español, aunque ninguno de los dos parece la solución alternativa en este momento. Y también se usan los parches puntuales de Alberto Abalde, Adam Hanga y Dzanan Musa, que pueden asumir ocasionalmente esa posición, y de hecho la asumen, pero no es la suya.

El Madrid necesita fichar si quiere aspirar a los máximos objetivos con garantía. Y va a hacerlo. La opción A era el regreso de Facundo Campazzo, un brillante remate a un proyecto ambicioso. Su llegada se veía cercana en las últimas fechas, y desde luego era lo más factible si el argentino volvía a Europa, pero el Facu ha optado finalmente por los Dallas Mave­ricks, donde se reencontrará con Luka Doncic. A pesar del chasco, la búsqueda no ha frenado. Este mismo sábado circuló con fuerza el nombre de Shannon Evans, el base del Betis, que promedia más de 20 puntos y de 8 asistencias en lo que llevamos de curso. Una óptima elección. Será Evans o será otro. Pero será. La necesidad apremia. Y mejor, cuanto antes.