El líder de la Champions se parece poco al finalista de Wembley
Nuri Sahin, ante su mayor reto como entrenador. Ha pasado poco tiempo, pero el Dortmund actual se parece poco al de la final de la Champions. Con respecto al once que salió a jugar aquel día en Wembley, han abandonado el club Hummels, Maatsen, Sancho y Füllkrug. Un quinto jugador, Adeyemi, autor de un hat-trick en la segunda jornada de la presente edición, sigue en la plantilla, pero está lesionado. Y el entrenador que obró el milagro del subcampeonato continental, Edin Terzic, se marchó en verano. Le sustituyó el que era hasta entonces su asistente, el ex jugador Nuri Sahin. Pese a su juventud -36 años-, ya tenía experiencia en un banquillo como técnico principal: dirigió durante 26 meses al Antalyaspor de la primera división turca. Sus resultados, teniendo en cuenta la dimensión de la entidad, fueron bastante buenos: se quedó a 6 puntos de Europa tras coger al equipo cerca de la zona de descenso en una fantástica primera campaña y logró una salvación mucho más agónica en la segunda; en la tercera, se marchó en diciembre con el equipo en la mitad alta de la tabla para aceptar el cargo de ayudante en el Dortmund. Tácticamente sigue usando el 4-2-3-1 que más utilizaba Terzic. Aunque el inicio no ha sido malo, los resultados fuera de casa en la Bundesliga sí han estado por debajo de la expectativa: aún no ha ganado lejos de su feudo, sumando un empate y dos derrotas, una de ellas muy abultada (5-1) en Stuttgart. En casa ha hecho los 12 puntos posibles -el último triunfo, el 2-1 ante el St. Pauli, muy apurado-. En Champions se ha impuesto en los dos encuentros, logrando vencer en Brujas por 0-3 y goleando al Celtic 7-1, lo que le ha colocado como líder de la competición.
Las novedades. A pesar de la importancia de las listas de jugadores que se fueron o que no están disponibles -a la primera hay que sumar a Haller, que se marchó cedido al Leganés, y a la segunda al ex del Girona Yan Couto y al internacional norteamericano Gio Reyna-, el Dortmund podrá presentar un buen equipo en el Bernabéu. Para regenerar su ataque, contrató a dos de los grandes goleadores dela pasada Bundesliga: Serhou Guirassy (28 goles con el Stuttgart) y Maximilian Beier (16 con el Hoffenheim). El marfileño es el que apunta a titular contra los blancos tras anotar el gol de la victoria contra el St. Pauli en el 83′ el pasado viernes. Pascal Gross se incorporó procedente del Brighton para aportar calidad a la distribución de balón en la medular -en la selección alemana es quien ha ocupado el puesto de Kroos en tres de los cuatro partidos posteriores a la Eurocopa-, pero su participación hoy está en duda tras ser sustituido en el descanso del último encuentro por un percance físico. Ha entrado en la convocatoria y, en caso de poder jugar, formaría pareja con Emre Can en la medular, con Sabitzer en un rol más adelantado. En la zaga, Ramy Bensebaini, el muy buen lateral izquierdo argelino que se perdió los partidos más importantes de la Champions pasada por una lesión en la rodilla, está ya completamente asentado en el equipo. A Hummels lo está supliendo el central Waldemar Anton, fichado del Stuttgart por 22 millones y medio. Menos elegante con el balón que el campeón del mundo de 2014, aporta solidez y sobriedad defensiva en un equipo que en los últimos años ha sido muy vulnerable atrás.
El revulsivo. Jamie Bynoe-Gittens, un extremo inglés de 20 años que pasó por las canteras del Chelsea y el Manchester City, se está convirtiendo en el gran agitador del equipo entrando desde el banquillo. En ese rol, marcó dobletes ante el Eintracht y el Brujas y dio la asistencia del 2-1 definitivo frente al St. Pauli con una gran acción de desborde individual.