El colmo de la fatalidad
El Madrid pagó muy caro una primera parte para olvidar, quizá un poco desorientado por una alineación inevitablemente afectada por la plaga de bajas.


La noche fue una sucesión de fatalidades para el Madrid, que terminó en el primer pinchazo en casa de la temporada después de ocho victorias. El equipo pagó muy caro una primera parte para olvidar, quizá un poco desorientado por una alineación inevitablemente afectada por la plaga de bajas, con Carreras (que terminó haciendo un gran partido) de central y Asencio de lateral derecho. Todo el trabajo quedó para la segunda parte, pero al poco de iniciarla vino el carrusel de males para los de Xabi. Primero, el gol de clase del sueco Swedberg. Luego, la doble acción de Fran García que le costó la expulsión.
Eso obligó al Real Madrid a un sobreesfuerzo que está por ver si se pagará ante el City. Se dejaron todo, corrieron hasta la extenuación presionando con uno menos y embotellaron al Celta. Olía a remontada heroica, pero los minutos fueron pasando sin que llegara ese gol que terminara de encender la meche del Bernabéu. Con uno menos, ya era demasiado difícil. Y al Madrid le sobraron esos últimos minutos locos que también le costaron la expulsión a Carreras por una protesta que para nada fue tan airada. Y es una pena, porque han sido las lesiones (de Camavinga y Trent) las que dieron al traste con el buen automatismo cogido en San Mamés. Ahora también Militao está fuera, y Huijsen entre algodones. Ante el City toca remar río arriba... y ganar como sea.
Noticias relacionadas
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp.
¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí






Rellene su nombre y apellidos para comentar