El Celtic llega lanzado tras golear al Rangers
En una nube. El Celtic va a recibir al Madrid en un estado de ánimo inmejorable. El sábado derrotó al Rangers en el derbi de Glasgow por un contundente 4-0 y mantuvo su inició perfecto en la Scotish Premier League: seis victorias en seis encuentros, lo que le otorga ya una ventaja de cinco puntos con respecto a su eterno rival. Y eso que el duelo empezó con una mala noticia para los católicos al lesionarse el goleador Kyogo Furuhashi en los primeros minutos de juego (le sustituyó el griego Giakoumakis, que físicamente es más fuerte). Sin embargo, no le echaron de menos y el israelí Liel Abada asumió el protagonismo anotando un doblete. El ex del Valladolid Jota marcó el gol más bonito del partido y el joven Turnbull completó la goleada aprovechando un error del portero McLaughlin, que estuvo desafortunado a lo largo de todo el choque.
Postecoglou y el ejército de japoneses. El Celtic asumió riesgos en el verano de 2021 contratando a un entrenador prácticamente sin experiencia en Europa, salvo por unos meses en el Panachaiki de la Tercera División griega: el australiano Ange Postecoglou. Llegaba, eso sí, con un buen currículum: había sido campeón de Asia dirigiendo a la selección de su país y había ganado la liga japonesa con el Yokohama Marinos. Esa aventura nipona le sirvió para detectar tanto talento desconocido y llevarlo a Escocia. En verano firmó al delantero Furuhashi y, viendo su buen rendimiento, en invierno multiplicó la apuesta fichando a sus compatriotas Maeda, Hatate e Ideguchi. Los resultados fueron excelentes, ya que el Celtic recuperó el trono de la liga escocesa imponiéndose a un Glasgow Rangers que estaba maravillando en Europa. De modo que, quince meses después de su llegada, Postecoglou ha logrado ganarse el respeto y el crédito de todo el fútbol escocés.
O’Riley, una gran revelación. Ahondando en su capacidad para encontrar futbolistas de valor en mercados más escondidos, el Celtic realizó una gran operación el pasado invierno contratando al joven media punta zurdo Matthew O’Riley. Tiene 21 años y llegó a Glasgow tras destacar en el Milton Keynes Dons de la medio desconocida League One. El chaval nació en Inglaterra, fue canterano del Fulham y es internacional sub-21 por Dinamarca debido a sus antecedentes familiares por parte de madre. Físicamente es muy poderoso, se acerca al 1.90 de altura, y posee un golpeo muy fino con su pierna izquierda. El pasado sábado dio dos asistencias en el contundente triunfo ante el ‘enemigo’ Rangers; una de ellas, a Jota, fue maravillosa.
Debilidad defensiva. Si en ataque el Celtic presenta argumentos para generar peligro en cualquier partido, su estructura defensiva se puede quedar un poco corta en la exigencia de la Champions. Joe Hart, a sus 35 años, es el portero titular. Esta es su segunda temporada en Glasgow tras dos años en los que prácticamente no jugó nada ni en el Burnley ni en el Tottenham. Los centrales Carter-Vickers y Starfelt son dominadores en el contexto local, pero deberían sufrir en la élite europea frente a atacantes móviles y dinámicos. El sueco, además, se lesionó en la rodilla en el Old Firm.