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El bético Rodri lideró a una gran Sub-21

Gran presentación de la Sub-21 en el Europeo, batiendo a domicilio por 0-3 a Rumanía, coorganizadora junto a Georgia. España ha ganado esta competición cinco veces, la primera en el ya lejano 1986, con Luis Suárez al frente de los Ablanedo, Quique Flores, Sanchís, Bakero, Eusebio, Begiristain… A esta edición, que clasifica para los JJ OO de París-2024 a los tres primeros, concurrimos con un seleccionador, Santi Denia, y una generación que ya ganaron juntos los europeos Sub-17 y Sub-19. Seis jugadores han vivido todo el ciclo y aspiran a la triple corona: Guillamón, Blanco, Abel Ruiz, Miranda, Víctor Gómez y Sergio Gómez.

No han ido allí sólo a clasificarse para los JJ OO, que no sería poco, sino a ganarlo. Se vio ayer por su juego ambicioso, echándose una y otra vez sobre el área rumana, protegida por una línea de cuatro defensas y otra de cinco medios, con un solo hombre descolgado arriba para nada. Rumanía tiene poco y se encerró sin rubor, con una absoluta falta de vergüenza torera. A España le tocó arriesgar mientras los locales jugaban la baza improbable de algún contraataque o un balón parado. Por lo visto, fue así como el coorganizador, Georgia, ganó 2-0 a Portugal. Pero España no ofreció resquicios y a base de insistencia e ingenio consiguió tres goles.

Fue extraordinario el partido de Rodri en el extremo derecho, donde fue un puñal en el costado de Rumanía. Desde allí creó pánico, más según avanzaba el partido y el equipo lo fue fiando todo a su inspiración. Al otro lado, Miranda y Sergio Gómez aparecieron menos, aunque bordaron la jugada del segundo gol. Si la cosa no acabó en goleada fue porque Abel Ruiz no estuvo fino y hasta echó fuera un balón a puerta vacía que es como para retirarle el saludo. Ya lo remediará en próximos partidos, el fútbol siempre ofrece revancha. El caso es que hay buen equipo, buenos repuestos y un extremo que es un demonio. Lo bastante para aspirar a todo.