El Barça y Xavi se van de parón rehabilitados

El del Barça en el Metropolitano es un triunfo de mucho valor. Llegó con un equipo castigadísimo por las bajas (Cancelo y Christensen se unieron a última hora a De Jong, Pedri, Ferran o Gavi) que jugó con una personalidad que se le echaba de menos. Y, sobre todo, con un plan. Fue una victoria de equipo que le permite irse reforzado al parón. Especialmente, a su entrenador. Después de ser un coladero en enero, Xavi ha tocado las teclas precisas para resucitar un equipo que después del 3-5 del Villarreal era un tren descarrilando. Ahora, suma cuatro jornadas sin encajar un gol.

Si el partido contra el Atlético de Madrid pudo servir de ensayo para el resto de partidos grandes que le esperan al Barça esta temporada (de momento, los dos del PSG y el Clásico), fue todo un éxito. Salvo caída inesperada del Madrid, al Barça, que ya es segundo, no le va a dar para ganar la Liga. Pero esto es lo que se le pide al campeón, resistencia hasta donde le alcance e ilusión para su masa social, tan necesitada de estímulos. Estos días, le llegan de todos sitios. Ter Stegen vuelve a hacer paradas imposibles, Lamine y Cubarsí son un tesoro, Gündogan el líder silencioso que prometía cuando llego del City; y Lewandowski parece rejuvenecido. Y de postre, João dejó su huella en el Metropolitano. El Barça y Xavi se van felices de parón.