El ‘asunto Enríquez’ no admite muchas vueltas
La Fiscalía investiga pagos de 1,4 millones entre 2016 y 2018.
Cuatro goles al Elche ponen al Madrid al día. Esta semana, ya europea, en la que la mitad de los equipos Champions descansa para dar lugar a que esta competición se acompase con la Europa League, ha servido para que el Madrid recupere el paso en LaLiga. No era éste partido que augurara grandes emociones, dado cómo anda el Elche, tristemente descolgado en la tabla. Faltaba además Vinicius, a cuya espalda cabalgan siempre emociones. Rodrygo se ocupó de sus correrías, Asensio, en la otra banda, abrió el marcador y Benzema convirtió dos penaltis. La media fue Valverde-Camavinga-Ceballos. Examen fácil para el ‘plan renove’.
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Rodrygo jugó tan bien y con tanta felicidad por la banda izquierda que hasta dio lástima, porque esa plaza tiene dueño, su paisano Vinicius. Menos académico, más alborotador, pero inevitablemente superior juntando unas cosas con otras. Para los que llevamos tiempo en esto sería un nuevo caso Gento-Manolín Bueno. El cántabro era menos estilista que el andaluz, pero resultaba demoledor. No hubo cuestión. Rodrygo es un estupendo futbolista, pero su espacio puede estar más bien detrás del delantero centro, quizá en un 4-2-3-1 futuro, con Tchouameni y Camavinga en un eventual doble pivote. Quién sabe. Sólo el tiempo lo dirá.
Pero más que eso se hablaba en la grada del sensacional descubrimiento de que el Barça le estuvo pagando una sabrosa soldada a Enríquez Negreira, exárbitro, cuando era nada menos que vicepresidente del Comité de Árbitros. “Informes técnicos”, dice el Barça. Consejos muy bien pagados sobre cómo debían manejarse los jugadores con los árbitros que les tocaran en suerte. La Fiscalía investiga pagos de 1,4 millones entre 2016 y 2018, terminados, mire usted por dónde, cuando dejó de ser vicepresidente del Comité Técnico, pero fuentes de la investigación sospechan que la cosa venía de dos décadas atrás. Me temo que esto tiene pocas vueltas que darle.
