Ceballos es el nuevo Garibaldi del Real Madrid
Lo del utrerano tiene entusiasmada a toda la afición del Real Madrid. Un jugón que parecía en permanente estado de hibernación al haber asumido un rol de suplente eterno, generado desde los tiempos en los que Zidane, de manera inexplicable, le condenó a un ostracismo que nunca fue argumentado. Recuerdo un doblete triunfal de Ceballos ante el Alavés en Vitoria al que respondió Zizou con media docena de partidos sin darle un solo minuto de juego. Algo se quebró ahí que nunca nos quisieron contar. Por el camino, el Madrid se perdió a un jugadorazo durante varias temporadas.
La famosa lesión de Tokio a costa de un egipcio de cuyo nombre no quiero acordarme, también le perjudicó notablemente el curso pasado. Pero ahora supo coger la bandera revolucionaria de Garibaldi, el famoso militar y político italiano que ayudó a la unificación de Italia en el Siglo XIX con esa media hora final en Villarreal que abrió una nueva era en ese ‘Madrid de la Transición’, como lo ha bautizado el propio Ancelotti. Ceballos ha firmado actuaciones pletóricas liderando la sala de máquinas, pidiendo la pelota sin que le queme y con una energía e intensidad que ha contagiado al resto del equipo. De hecho, la remontada en el derbi copero llegó por accidente, dado que la lesión de Mendy permitió su entrada al campo para dar un giro completo a la posterior remontada del Bernabéu.