Caviar Alcaraz
En Indian Wells, la población de Estados Unidos con una mayor proporción de millonarios, se sabe, sin duda, paladear lo bueno. Por eso Larry Ellison, el magnate que compró el torneo para que siguiese siendo el quinto grande, el todopoderoso Bill Gates, la actriz Charlize Theron, la cantante Pink o el genio Rod Laver no se han perdido estos días los partidos de Carlos Alcaraz. El nuevo genio. El chico que dejó su sello con una batalla en semifinales ante Rafa Nadal el año pasado y este ha vuelto para llevarse el torneo y recuperar el número uno.
Si alguien podía frenar a Charly era Daniil Medvedev, que venía de encadenar victorias en Róterdam, Doha y Dubái con un tenis excelso. Pero el murciano le anuló. Con el viento árido del Valle de Coachela azotando, la potencia de Alcaraz fue capaz de tumbar las rachas y al ruso. Antes cayeron otros dos tenistas destinados a dar guerra también muchos años, Felix Auger-Aliassime y Jannik Sinner. En el Masters 1.000 californiano no estuvieron Novak Djokovic ni Nadal. Los dos volverán, previsiblemente, sobre la tierra de Montecarlo. De momento, la primavera que irrumpió hoy es del rey Alcaraz, en la cima de nuevo. Medvedev no le hizo pupa. ¿Serán capaces el serbio y Rafa? La respuesta la tendremos en el Principado. Otra plaza de millonarios. Y Alcaraz ahora mismo es caviar regado con Moët Chandon.