beIN SPORTS desnudó el sistema VAR
Al poco de acabado el partido entre el Madrid y el City, beIN SPORTS lanzó ‘urbi et orbi’ una imagen según la cual poco antes del gol de De Bruyne el balón habría salido por la banda. Fue algo que habían reclamado con energía los madridistas, pero que ni el linier ni el árbitro estimaron. Bernardo Silva rescató el balón del limbo, la jugada siguió y tras pasar por Camavinga, que tomó una decisión equivocada mandando un balón dividido entre Rodrigo y Rodrygo que ganó, como no podía ser menos, el primero de los dos, llegó el gol de De Bruyne, que replicó, o digamos que hasta mejoró, el tirazo de Torró en la final de Sevilla.
Acabado el partido circuló una imagen de beIN SPORTS según la cual el balón habría efectivamente salido de banda antes, aunque no inmediatamente antes, como ya veremos. Los jugadores del Madrid reclamaron inútilmente la jugada y hasta diríamos que es vano reclamarlo a posteriori, porque desde que el balón salió fuera sin que el cuerpo arbitral lo apreciara hasta el gol medió un cambio de acción, puesto que el Madrid recuperó el balón y fue sólo tras la equivocada decisión de Camavinga cuando se desencadenó la jugada del gol. O sea: ni aunque hubiera existido sistema para detectar que el balón salió antes del campo se hubiese anulado.
Pero a lo que voy no es eso, sino a la imperfección del sistema. Hay cámaras alineadas con la línea de fondo, como las hay en la frontal del área, pero no las hay ni alineadas con las líneas laterales del área ni con las de banda. El sistema VAR, que pretende ser un ojo que todo lo ve, está construido sobre descuidos, sin otra base que la distribución de cámaras que libremente decide el operador de turno, que dedica sus cámaras a las prioridades que él aprecia como tales para su transmisión. Así que pasa lo que pasa, que en todo un partido de Champions un balón sale fuera y nadie lo advierte. Hasta que un agente externo como beIN SPORTS hace lo que no hace la UEFA.