Bajas y ruido en un Bayern con piel de cordero
Un clima enrarecido. Aunque la victoria frente al Arsenal pareció aplacar el ruido constante que ha acompañado a la temporada del Bayern, la realidad es que la tranquilidad en el ambiente ha durado poco. Ya no es que el conjunto más grande de Alemania haya perdido la Bundesliga casi sin competirla o que le echara de la DFB Pokal un equipo de tercera como el Saarbrücken. Las críticas han sido constantes y las últimas han llegado desde la mismísima presidencia de honor del club, ocupada por un Uli Hoeness que censuró abiertamente la poca paciencia que él entiende que Thomas Tuchel tiene con los jugadores jóvenes. La sucesión del entrenador también está dando mucho que hablar: ha trascendido que Ralf Rangnick es uno de los favoritos y la noticia no ha sido bien recibida por parte de la hinchada ni de los principales opinadores.
Una plaga que no se detiene. El Bayern afrontó el partido de este fin de semana, ya intrascendente, frente al Eintracht de Frankfurt reservando a varios titulares y pensando en que no se ampliara la larga lista de futbolistas lesionados. Y sin embargo, dos de los que se presumían fijos ante el Real Madrid y que sí estuvieron en el once del sábado tuvieron que ser sustituidos por percances que ponen en duda su participación en esta semifinal. Se trata del central Matthijs De Ligt y del centrocampista Konrad Laimer. El caso del neerlandés parece el más grave, y si a esto le sumamos la incertidumbre con respecto al estado de Upamecano, a Tuchel le quedan pocas opciones en el eje de la zaga. La pareja formada por el coreano Kim Min-Jae y el inglés Eric Dier es la que tiene más opciones de arrancar el choque en una zona del campo en la que el Bayern no ha encontrado en ningún momento una dupla que se haya afianzado y que haya resuelto un debate que parece no tener fin. Y es que la gran diferencia entre el Leverkusen y los bávaros ha estado, sobre todo, en la parcela defensiva, en la que el cuadro muniqués no ha mostrado ningún tipo de solidez. De centro del campo hacia arriba sí presenta, en cambio, una nómina de jugadores que intimida.
Las incógnitas que más pesan. De las posibles bajas del Bayern, es evidente que las más sensibles serían las de Musiala y Sané. Son los jugadores más punzantes en tres cuartos de campo, las dos grandes amenazas ofensivas más allá de Harry Kane. Con Coman también lesionado y con Gnabry renqueante, las opciones para sustituirlos son escasas. Thomas Müller, a sus 34 años, se perfila como titular en la banda derecha, y Tuchel confía en poder recuperar a alguno de los jugadores cuya participación está en duda. Si no es así, podría tener opciones el joven francés Mathys Tel, una gran promesa a la que sin embargo no se ha podido medir en compromisos de tanta exigencia. Incluso Raphaël Guerreiro actuando como extremo no es una alternativa nada descartable y que ya ha sido probada esta temporada.
Pavlovic, una solución inesperada. En una temporada hasta ahora muy complicada, la aparición del medio centro de origen serbio y alemán de nacimiento Aleksandar Pavlovic ha permitido a Tuchel disponer de más opciones en la medular y usar a Kimmich como lateral derecho sin que la zona central del campo se resintiera demasiado. A sus 19 años, este pivote defensivo ya ha sido convocado por Julian Nagelsmann para representar a la selección absoluta germana, aunque una amigdalitis le impidió debutar. Ante el Arsenal se quedó sin participar ya que el entrenador prefirió la experiencia de la pareja Goretzka-Laimer, pero los problemas físicos del austríaco le podrían abrir la puerta en el choque frente al Real Madrid. Aunque su perfil no es estrictamente posicional y también es capaz de pisar el área rival, sin duda sería el que guardaría más la posición y le permitiría a Goretzka soltarse hacia adelante.