Al Villarreal le picaron mil avispas

Este Barcelona en ataque es como si le pegaras una patada a un panal de avispas asiáticas porque te pican por todos los lados y no sabes ni cómo, ni por dónde te vienen. Además, si le pegas una patada a un avispero lo suyo es estar bien tapado y cubierto por todos los sitios posibles, ya que si no es así, lo vas a pasar muy mal.

Al Villarreal le han picado y le han hecho mucho daño en casi todas la picaduras, y ya no sabes si es por lo potentes que son los aguijones o por lo poco cubierto que estabas. Ya que aunque sea este Barcelona, son muchos goles y algunos más fáciles de lo habitual. Pero dicho esto, al Villarreal hoy le ha salido todo al revés, y no merecía tanto castigo.

Los amarillos ya se fueron al descanso mereciendo más, pero unas veces por fueras de juego milimétricos y otras la falta de acierto en jugadas muy claras, sentenciaron el partido. Algo parecido pasó en el arranque de la segunda parte, en la que parecía que los locales iban a empatar y se iban a meter en el partido. Aunque este Barcelona pica y pica, no baja el ritmo ni la forma de apretar en ningún momento, algo que sorprende a estas alturas. El Villarreal pasó del 2-2 a un 1-3 que los mató de forma definitiva. Los de Marcelino siguen mostrándose potentes arriba, pero vulnerables atrás.

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