Este Barça es pura magia

Volvíamos a tener un rival alemán sobre el césped, de nuevo había que mirar a las gradas porque lo que allí pasaba era noticia. Pero el Barça-Wolfsburgo estuvo a años luz de ese Barça-Eintracht convertido en una mala digestión para el club. Bastó un minuto para que Alexia amenazara a Schult y apenas dos para que Aitana abriera la goleada en el Camp Nou. Lo que vino después no fue más que una nueva obra de arte. El hincha culé es feliz porque disfruta de un Dream Team empeñado en revalidar ese título de la Champions con el que hizo historia la pasada temporada.

El Wolfsburgo echó en falta el músculo de Oberdorf en la media, también el olfato goleador de quien hasta hoy era la máxima realizadora de la competición, Wassmuth, a la que apenas llegó un balón, pero probablemente es en la grada donde arrancó su tormento. No es fácil jugar frente a más de 90.000 aficionados y un rival de dulce. Un equipo con la jerarquía de Mapi León o Paredes atrás, el toque y cerebro de Aitana, la clase de Alexia o el saber jugar (con y sin balón) de Jennifer Hermoso. Disfrutemos de esta maravilla que no es sino la base de la Selección española a la que en julio aguarda el apasionante reto de la Eurocopa. Normal que los 91.648 aficionados no dejaran de cantar durante todo el partido. A este paso incluso una catedral como el Camp Nou se nos va a quedar pequeña.