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El gol de la Liga.- Con 1-0 en el marcador, a los violinistas les dio por tirar de partitura y tocar una pieza para el recuerdo. Una combinación coral y plástica que involucró a Asensio, Valverde, Benzema, otra vez Asensio y otra vez Karim, con taconazos y arabescos varios, para terminar definiendo Vinicius con el interior del pie. La obra de arte permitió al Bernabéu salir de la abulia y ponerse en pie para solazarse con lo que acababa de presenciar. Los 42.180 aficionados que pasaron por taquilla vieron justificado su desembolso con semejante maravilla. El fútbol es pasión, es intensidad y es espectáculo. Si a este gol barroco le añades el que le precedió de Asensio, El Señor de los Golazos, solo queda felicitarse por haber superado el traumatismo emocional que dejó la derrota en París. La conclusión es que el líder ha vuelto. Su segundo tiempo fue lo que se espera de este equipo, que se había atascado hasta llevar solo un gol (el de Asensio al Granada) en seis horas y media de juego. Pero el balear tocó de nuevo el interruptor y después Vini y Karim se sumaron a la reconquista de la credibilidad extraviada en el Parque de los Príncipes. Me da que lo peor ya ha pasado.

El abrazo.- Hay más síntomas para ser de nuevo optimista. El abrazo sentido y sincero entre Vinicius y Ancelotti tras el gol del brasileño nos habla de la unidad de este vestuario, que no se va a descomponer por un par de malos resultados. Los jugadores creen en Ancelotti y Carletto cree en ese núcleo duro que ha armado, que le está dando buenos beneficios. De momento ha caído ya un título (la Supercopa), en Liga va disparado hacia la corona número 35 y en Champions está a solo dos goles de eliminar al todopoderoso PSG. No estamos tan mal...

Mendilibar.- El Alavés está tocado, pero no hundido. Mendilibar es uno de esos viejos sabios del fútbol que ha toreado en todas las garitas imaginables. El Glorioso está ahora mismo en la B, pero no les den por muertos. De hecho, con 0-0 tuvo Pere Pons el gol que hubiese puesto de los nervios al Bernabéu. Courtois, con su gigantesca presencia, le intimidó y le dejó sin portería. Una ‘parada’ que no saldrá en las estadísticas...

El calendario.- Lo bueno es que ahora el calendario ya no ahoga. En los próximos 14 días solo dos partidos aparecen en el horizonte: el Rayo en Vallecas y ante la Real Sociedad en el Bernabéu. Y luego, la gran cita del 9-M. Toca cargar las pilas. El Nantes nos da una pista. La gente, en un primer tiempo aburrido, tiraba de sus móviles para ver cómo iba el Nantes, que pasó por encima del PSG. El 3-1 final es una pista fiable. Con ese resultado, el 9 de marzo el Madrid se meterá en los cuartos de final de la Champions. De hecho, con el 3-0 al Alavés vi otros ojos en el madridismo militante. Se les está poniendo cara de remontada. Escrito queda.

Fiel afición.- El triunfo y la consolidación del liderato va por Pedro, el hermano de nuestra leyenda Goyo Benito, así como Poli, el profesor de Coslada, Severino de Villablino, Carolina de Ávila y Carlos Cambón, Director del Colegio Español Cervantes de Montevideo, así como sus hijos Mathias (economista de 32 años) y Germán (profesor de 28). Cruzaron el charco desde Uruguay y disfrutaron del partido desde el palco del Bernabéu junto a su compatriota Pepe Santamaría, uno de los artífices de las tres Copas de Europa ganadas entre 1958 y 1960. Y no me olvido de Luis Rubio Pérez, un castizo nacido cerca de Las Ventas hace 72 años pero que hizo vida y crianza de su pasión madridista en Miranda de Ebro. Nos ha dejado para siempre, pero el equipo de su vida le seguirá dando muchas alegrías. Seguro. El Madrid ha vuelto.