Alarmante. Simeone construyó siempre sus equipos en base a una buena defensa. Para ello destinó minutos y minutos, entrenamientos y entrenamientos para insistir en la presión, para ver dónde podía hacer más daño al rival, para asfixiar y ahogar al contrario en la zona donde más dificultades le podía crear... Siempre dio gusto comprobar cómo defendía el Atlético. Mientras los enemigos del Cholo proclamaban a los cuatro vientos la excesiva agresividad del equipo rojiblanco. Pero el técnico argentino siempre fue a lo suyo. Bien es cierto que tuvo a jugadores como Gabi, Tiago, Godín, Miranda... Hace un año el Atlético fue campeón de LaLiga, por delante del todoperoso vecino. Unos meses después del título, el equipo muestra una endeblez defensiva alarmante. Ya puede jugar mal, bien o regular, que concede tres o cuatro ocasiones muy claras al rival. Y así es imposible vencer. Es imposible cuando un rival remata de cabeza ante la pasividad de la zaga y cuando un defensa tuyo regala un gol. Con esa endeblez no se pueden ganar partidos. Ante la Real Sociedad volvió a suceder y el equipo está fuera de la Copa. No altera demasiado los planes del Atlético, quien pondrá todas sus fuerzas en meterse entre los cuatro primeros en el torneo liguero. De cara al Valencia, hay que agarrarse a que estarán Savic y Giménez. Algo es algo.
Lamentable. Da pena ver imágenes como las sucedidas a la llegada del Atlético al estadio de la Real. Vergüenza ajena comprobar el hecho de que todavía hay gente que va a los estadios a montar bronca, a no dejar a los demás ver partidos en paz. Lo peor es que eso deja en mal lugar a la Real Sociedad cuando para la gran mayoría ir a presenciar un encuentro es algo festivo y para disfrutar. Lo dicho, lamentable. Como también que un seguidor rojiblanco acabara en un centro hospitalario. Uno piensa que esto es cosa del pasado, pero ya vemos que no. Tampoco en San Sebastián.
Camiseta. El Atlético jugó con una camiseta en la que llevaba el escudo anterior como homenaje a los 75 años de la denominación actual del club como Atlético de Madrid. Gran parte de la afición lo celebró con éxito y la camiseta tuvo tanta acogida que se agotó en las tiendas oficial del club. En abril habrá una nueva ocasión de comprarla. Muchos entendieron que es una forma de recular del club mientras que desde la entidad entienden que es una manera de rendir un homenaje en una fecha tan señalada. Ni la cuarta equipación ni el escudo de toda la vida dieron suerte al equipo.
Confianza. Simeone deberá sacar lo mejor de sí mismo para solventar esto. El sábado hay partido en el Wanda Metropolitano y la afición le pedirá a los suyos dar el máximo. No pueden arrastrar esa camiseta, ni la de ahora ni la de antes. Señores, deben tener un poco de orgullo. Por lo menos, tienen que echarle algo algo de ganas. Lo mejor, los minutos de Javi Serrano y Carlos Martín.