Me niego a un nuevo Alcoyanazo
La Copa mola. Es una fiesta en la que no está reservado el derecho de admisión. De joven recuerdo una noche maravillosa en la que el Novelda tumbó al Barça de Van Gaal. Pero tampoco los madridistas estamos para sacar pecho en la materia porque nos lo pueden partir solo con nombrar el Alcorconazo y al Alcoyanazo. Por eso conviene tener memoria y afrontar el partido de El Collao "con el mejor once posible", como avisó Ancelotti ante los medios. Carlo quiere este título como sea. Él ganó en 2015 la final de Mestalla al Barça de Messi, Neymar y Luis Suárez (2-1), en la famosa noche del golazo histórico de Bale en su carrera de Carros de Fuego con Bartra. Ganar la Copa es un plus y es necesario escribir la ruta sin renglones torcidos.
Es el día para que los Hazard, Asensio Rodrygo, Mariano o Isco den un paso adelante y salgan de ese Spa en el que parecen instalados con una falta de hambruna irritante. Carletto está tomando nota de todo. Y de todos. Por eso Rafa Marín (un central con fuste y futuro) y Peter (un Jackson Five con una pinta extraordinaria) están al acecho con ganas de comerse el mundo. El que no estará hoy, para variar, es el ínclito Bale. No está lesionado, pero no se siente bien para jugar en un campo humilde como el del Alcoyano. Me voy a morder la lengua para que no me sangre más con el galés. Y Barnett, tú tápate que la afición no olvida...