La UEFA carga de munición a Florentino

Con este sorteo en Nyon la UEFA ha quedado peor que Cagancho en Almagro, que diría un castizo. Mal momento para semejante pifia, con Florentino y Agnelli soplando las brasas de la Superliga para ver si aún hace llama. Encima, el gran perjudicado ha sido el Madrid, que tiene por qué quejarse pues los dislates se dieron después de que ya hubiera salido emparejado con el Benfica en sorteo sin sombra. Pero tras los errores producidos con los rivales del Villarreal y el Atlético, la UEFA decidió repetirlo todo y el Madrid, que ya se relamía pensando en el Benfica, se vio de segundas dadas enfrentado al PSG de Messi, Neymar y Mbappé.

Enfado del Madrid aparte, es todo un descrédito para la entidad del que hay un culpable con nombre y cargo, Michael Heselschwerdt, director de comunicaciones y tocador de bolas. Fue un doble craso error en un sorteo con dos simples condicionantes, no enfrentar a connacionales ni a quienes ya se hayan encontrado en la fase de grupo. Tal acto de dejadez que exige una expiación. Y desde luego habla mal de una organización en cuyas manos tenemos confiada la organización del fútbol europeo, ese fabuloso entretenimiento de masas que es al tiempo una industria de muchos ceros. Maldita la gracia que me hizo la risita de Arshavin.

En contraste, los otros dos equipos españoles salieron muy mejorados de la repetición. El Atleti cambia el intratable Bayern por el Manchester United, en el que Cristiano aún da guerra en un equipo en horas bajas, y el Villarreal pasa del terrorífico City a la Juve, otro grande en días grises. Dos clubes con más fama que presente, ideales para quedar muy bien si pasas y no tan mal si caes. El de la Europa League enfrenta al Barça con el incómodo Nápoles, eliminatoria estrella, al Sevilla con el Dinamo Zagreb, a la Real con el Leipzig y al Betis con el Zenit. Deseo suerte para todos y un sucesor capacitado para el puesto del que Heselschwerdt debe salir eyectado cuanto antes.