Larga vida a Kroos y Modric
Excelente partido el jugado por el Real Madrid en Kiev. Una actuación cocinada a fuego lento gracias al gran tratamiento de balón que tuvieron los de Ancelotti en un encuentro sin apenas pérdidas, desactivando los intentos de presión y robo del Shakhtar con una precisión de cirujano. Se sintió muy cómodo el equipo a la hora de tener posesiones largas y, también, para correr en transición. En ambas facetas destacaron dos hombres por encima del resto dirigiendo las operaciones. Kroos y Modric, dos centrocampistas ya legendarios, que ofrecieron un recital.
Los de De Zerbi no estuvieron demasiado agresivos sin balón y el hecho de dejar tiempo y espacio a estos dos fue un suicidio. Al alemán se le vio muy fresco al descansar en este parón de selecciones y Luka nos dejó una asistencia para el recuerdo, una maravilla en forma de pase para el primer gol de Vinicius.