Se están comiendo un marrón
Imagino a Lucas, un extremo reconvertido a lateral, luchando por parecerse a Carvajal (un 'dos' top cuando está al 100%). Imagino a Militao sintiéndose Varane, un central que llegó siendo un niño al Bernabéu y que se hizo hombre levantando cuatro Champions en cinco años (fue titular en las finales de tres de ellas). Imagino a Nacho, un inagotable defensa multiusos, sintiendo lo alargada que es la sombra de Sergio Ramos, posiblemente junto a Hierro y Santamaría el mejor defensa de la historia del club. También imagino a Alaba y a Miguel Gutiérrez sintiendo lo complicado que es imitar en sus prestaciones defensivas a Mendy, una roca y un especialista en el trabajo de cerrar espacios en la banda izquierda. Pónganse en el pellejo de los cuatro.
No es culpa de ellos. Se están comiendo un marrón y hay que darles confianza para que alejen esos fantasmas de sus antecesores en el puesto y sean ellos mismos. No olvidemos que los cuatro son internacionales y que los cuatro han hecho grandes partidos en su momento. ¿Recuerdan lo bueno que fue Lucas con Zidane? ¿Olvidan los partidazos que hicieron Nacho y Militao de febrero a mayo de este año? ¿Y las exhibiciones de Alaba en el Bayern como lateral zurdo? Matarles ahora es lo fácil. Pero seguro que pronto recuperarán su mejor nivel. Yo no me bajo del barco. Me niego.