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JOAQUÍN MAROTO

Luis Enrique no me coge el teléfono, ni a Iago Aspas tampoco

Luis Enrique busca la femoral de la Prensa. Lo hace a conciencia. Es un truco que aprendió en sus tiempos de jugador, cuando le rompió la cámara a un fotógrafo de Marca, Luis Ángel Alonso, porque le pilló pasando el reconocimiento médico con el Barça cuando aún era jugador del Real Madrid, truco que ha ido perfeccionando con los años. Es una regate que usa cuando los resultados no le acompañan. Y como venimos de una derrota ante Suecia que complica la presencia de España en el Mundial, Luis Enrique dijo que "no os doy lo que os gustaría que os diera y no soy gilipollas: ya sé lo que puedo esperar de vosotros. En un año no he tenido ni una llamada de vosotros y es mejor que siga así".

Que quede constancia de que yo le solicité una entrevista para el AS al teléfono que tengo de él, que acaba en 99, y ni siquiera respondió a mi mensaje, que aún conservo. Pero por si acaso tuviera su número mal, que conste en acta que también le pedí una entrevista durante la pasada Eurocopa. Lo hice por la vía reglamentaria, por medio del eficiente jefe de Prensa de la RFEF, Pablo García-Cuervo. Luis Enrique no aceptó. Tengo por norma pedir una entrevista en las fases finales de Mundiales o Eurocopas desde México-86. Nunca, hasta Luis Enrique, tuve un no por respuesta. Y recuerdo las que hice, y no siempre en circunstacias fáciles (Del Bosque, por ejemplo, la otorgó al día siguiente de caer eliminados en Brasil 2014 porque así se había comprometido previamente) a Miguel Muñoz, Luis Suárez, Vicente Miera, Javier Clemente, José Antonio Camacho, Iñaki Sáez, Luis Aragonés, el ya citado Vicente del Bosque..., en fin a todos sin excepción en los últimos 40 años, salvo a Luis Enrique. Sí aceptó la invitación de AS Robert Moreno, que no jugó ninguna fase final pero fue quien nos clasificó para la última Eurocopa.

Luis Enrique, por cierto, es el único de los 55 seleccionadores de Europa que no concede entrevistas. O mejor dicho, que no las concede a la prensa especializada, porque hace no tanto dio una a una web de ciclismo no para hablar de Carvajal, sino de bicicletas. De modo que no cuela lo de buscar la femoral. Lo que tiene que hacer Luis Enrique es buscar la victoria, que ya que he citado a todos sus prececesores, me parece justo señalar que ninguno desde Clemente, hace ya 28 años, había perdido un partido de clasificación para el Mundial hasta el del otro día, en Estocolmo. Y por si no ha quedado claro que por mí no ha sido lo de la entrevista a Luis Enrique, hoy de nuevo y desde esta tribuna le vuelvo a pedir una para los lectores del AS. Les interesa saber la razón por la que juega Eric García y no está Nacho, por ejemplo. O el motivo por el que no llama a Iago Aspas. Quedo a la espera de su amable respuesta. Muchas gracias, Luis Enrique.