El hombre más feliz del mundo
Compareció en la sala de prensa que no cabía en el traje. Sabemos de sobra que no es demasiado expresivo ni carismático. Si no estuviera en el negocio del fútbol, apenas llamaría la atención. Tampoco está muy dotado para la oratoria, pero en esta ocasión se expresó de maravilla, las palabras se salían a chorro. Con seguridad, dijo exactamente lo que quería decir. Y lo que no quiso decir, no lo dijo. Por ejemplo, la palabra "Barcelona".
Hablo con la seguridad del que ha cumplido su sueño. Que esa Champions tan deseada desde hace tanto tiempo está a la vuelta de la esquina. Que volverá a levantar trofeos tras una temporada para olvidar. Se sentía como el niño que se levanta la mañana de Reyes y contempla anonadado que todo tiene en el comedor de casa todo lo que había pedido. Y más. Porque estar al lado de Sergio Ramos, Donnaruma, Mbappé, Neymar, Di María, Paredes, Keylor, Achraf es como comprarte para tí solo toda la PlayStation.
Cumplía el sueño. Y añadía a eso el hecho de saber que había derrotado al rival que más de una vez le había apartado del camino. Hay gente que es de una pasta que para ser inmensamente feliz no sólo necesita experimentar el placer, sino ver que se lo ha arrebatado a otros. Gengis Khan tiene varias frases al respecto, por si les interesa. Ese era Nasser Al-Khelaïfi al lado de Messi: el tipo más feliz del mundo. Tan feliz, que cuando le preguntaron sobre el Fair Play Financiero, no perdió la sonrisa y respondió con buenas palabras eso de que "por Far Play no me viene nada". Un hombre feliz.
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