Contra los pronósticos

Nos abrazamos y soltamos toda la tensión. "¡Lo hemos conseguido!", le dije a Sandra. Toda la tensión y la emoción acumuladas durante mucho tiempo salieron. Vinimos al Budokan sabiendo que la mayoría de la gente lo veía perdido contra Shimizu, pero yo confiaba en ella. Le dije que era capaz y nunca la he mentido. Sabía que podía ser oro olímpico.

Los Juegos han sido sido el campeonato que más tranquila ha estado porque sólo el hecho de estar en la final ya era un regalo. Y eso es producto de la confianza que tiene en lo que hacemos. Unos días antes, ya le dije a Sandra que esto era como un examen en el que te dicen las preguntas el día de antes. Cuando te las sabes, estás deseando hacerlo. Así es como salió a ejecutar el kata.

Además, el kárate ha demostrado al mundo lo que significa. Es un deporte que tiene capacidad para estar de sobra en otros Juegos más allá de Tokio. No puede desaparecer del programa. Los jóvenes deben alimentar su ilusión con el sueño olímpico. Como alimentó la de Sandra.

 Jesús del Moral es entrenador y marido de Sandra Sánchez