Un Madrid con poca pegada
Creo sinceramente que el Real Madrid hizo un buen partido contra el Sevilla. Con la excepción de unos primeros minutos donde los de Julen Lopetegui tomaron el mando a través del balón, y con la impresión de que la idea inicial era imponer un ritmo alto ante la posibilidad de encontrarse un Madrid justo de piernas después del esfuerzo realizado contra el Chelsea. No fue así. Vimos al equipo de Zidane muy agresivo, sobre todo después de recibir el 0-1, y que consiguió llevar a los hispalenses a defender muy cerca de su portero durante el resto del encuentro. A partir de ahí, el equipo encontró un poco de atasco.
O a Karim Benzema se le encienden las luces o es difícil que alguien encuentre los caminos hasta las porterías rivales. Algo de Vinicius, también Odriozola, que fue el único que le ofreció profundidad a los blancos. Pienso que en un colectivo donde faltan futbolistas definitivos, a la espera de que la próxima temporada Hazard pueda parecerse al futbolista que conocíamos, seguramente Marco Asensio debe estar en el campo. Es ya el segundo goleador detrás de Karim y el francés necesita socios de cara al gol. Igualmente, y con la excepción de Odriozola, también está faltando generar buenas situaciones por fuera, algo que siempre ha caracterizado a este equipo en los últimos años, donde era capaz de destrozarte a través de los centros laterales.