Sin cohetes en Vitoria por el virus y por este Madrid
La sensación de ganar al Madrid en Valdebebas no fue lo mismo que hacerlo en el Bernabéu en LaLiga ante 90.000 personas. El mérito del equipo de Machín es incuestionable, pero la falta de tensión resultó evidente. Hay que jugar el partido por decreto en una ciudad deportiva por obras en lugar de en un campo. Pero no es lo mismo.
El Madrid no está al nivel de otros años y Pablo Machín lo sabía. Con un 4-4-2 atacando y tres centrales defendiendo, el conjunto vitoriano se adelantó y luego supo mantener las rentas. Desde luego Lucas Pérez no genera debates de cómo lanzar los penaltis. Duro y al hierro. Courtois lo adivinó, pero no sirvió para nada. Si alguien quiere profundizar… que mire el escorzo en el momento del golpeo, casi se cae en los apoyos.
Por lo demás, el Alavés hizo su trabajo y se marchó a su casa con la sensación de la labor bien hecha. Hace unos años habría noche larga en la capital alavesa. No hubo grandes alegrías ni lanzamientos de cohetes en Vitoria. Será por la tristeza que transmite el coronavirus. O porque el Real Madrid es mucho más terrenal que en otras temporadas.