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LA PIZARRA TÁCTICA

El giro es Luis Enrique y Ansu

06/09/20 LIGA DE NACIONES CORONAVIRUS COVID19  PARTIDO DEL GRUPO A DE LA LIGA A  ESTADIO ALFREDO DISTEFANO DI STEFANO  SELECCION ESPAÑOLA ESPAÑA - UCRANIA  LUIS ENRIQUE
MIGUEL MORENATTIDIARIO AS

Algo se mueve en España. La letra y la música suenan bien y la transición va por el camino correcto. La notable victoria ante Ucrania, un rival de envergadura pese a que no lo pareciera por mérito español, concreta las ideas que maneja Luis Enrique para dar un nuevo impulso. La Selección fue un equipo de jerarquía, vivo, profundo y cohesionado. La agilidad en la posesión de balón y el hambre en la presión escenifican su progresión. Si Luis Enrique inauguró su primera etapa con actuaciones impactantes ante Inglaterra y Croacia, este reestreno no le anda a la zaga.

España tramitó el encuentro con una superioridad rotunda en todos los registros del juego. Tuvo amplitud, expresividad interior, sentido de la anticipación, movilidad, pegada y celo en cada una de las facetas. Luis Enrique volvió a insistir en mantras sobre los que trabaja. Dani Olmo y Ansu como extremos permutaron su posición abierta con ofrecimientos en los intervalos interiores y los laterales asumieron los espacios que estos dejaban libres. Thiago y Mikel Merino actuaron a alturas distintas y Gerard Moreno se desgastó en los apoyos. Con una salida de balón limpia, bien dirigida por Sergio Ramos y facilitada por el bloque medio pasivo de Ucrania, España se manejó con soltura con cambios de orientación continuos al lado débil. La velocidad en la circulación fue la mejor señal en un equipo, notificada en la toma de decisiones de un Thiago sobre el que gravitará el juego de la Selección en este proceso transformador.

La presión adelantada también se identifica como esencial en la pauta marcada por Luis Enrique. Nadie ahorra un gramo de esfuerzo, nadie se desconecta. Todo el bloque acompañó y mordió. Incomodar a Pyatov como se hizo, un portero sobrepasado por el tiempo que ya se equivocó en la Europa League con el Shakhtar en este capítulo, se debió a una decisión de entrenador que prepara los partidos. La buena impresión general destacó a Luis Enrique y al colectivo, pero Ansu mereció el halago mayor por su naturalidad. Otra vez cocinó una actuación soberbia por lo que representa para el presente y lo que significa para el futuro. Es un jugador de esta época en la que España se ha de imponer con algunas armas del pasado y otras que la diferencien hoy.

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Ucrania logra salir de la presión de España en un saque de banda, pero Zinchenko busca la apertura a la banda derecha y Reguilón anticipa con acierto. Atento y resolutivo. El inicio del gol de Ansu.