Luis Rubiales será proclamado el próximo día 21 presidente de la Federación para los próximos cuatro años. Supone que estará al frente de la RFEF al menos durante los JJ OO de Tokio, la Eurocopa de 2021 y el Mundial de Qatar. En dos años al frente de la organización, Rubiales ha hecho cosas muy buenas. Fundamentalmente, la renovación de la Copa, el supercontrato de la Supercopa y la representación de España en UEFA y FIFA. Eran tres áreas casposas desde tiempos remotos y con Rubiales se han modernizado, han pasado de deficitarias a rentables y han ganado en emoción.

Rubiales va a ser reelegido por aclamación porque ha hecho las cosas bien, y por eso no tendrá rivales. Casillas se quedó en el camino. Iker comprendió que no tenía chance. La prueba son los más de cien avales que ayer entregó Rubiales en la Federación. Ha presidido con criterio y capacidad. De Villar no podemos decir lo mismo. Pero es cierto que el saliente tuvo la suerte de ganar dos Eurocopas y un Mundial. Tuvo la suerte de presidir la RFEF de Casillas, Puyol, Xavi, Iniesta, Silva y Villa. Rubiales, no. Es más, tuvo que lidiar con Lopetegui en Rusia 2018, luego con Hierro y más tarde con la crisis entre Luis Enrique y Robert Moreno. Todo ello, regadito con la pandemia, por si era poco. Pero aún así, todo ok, José Luis. Él más que nadie sueña con una España otra vez campeona. Suerte.