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LA PIZARRA TÁCTICA

La brújula de Thiago y la sabiduría de Ander Herrera

Bayern Munich's Spanish midfielder Thiago Alcantara gestures during the UEFA Champions League final football match between Paris Saint-Germain and Bayern Munich at the Luz stadium in Lisbon on August 23, 2020. (Photo by David Ramos / POOL / AFP)
DAVID RAMOSAFP

El eterno Bayern siempre vuelve. Su pisada de campeón demostrada durante esta Champions express quedó refrendada ante un PSG que no se achicó y dio la cara. Al Bayern no se le puede negar la justicia del título, pero a su rival en la final tampoco se le puede desmerecer en un curso que ha dado el paso necesario a nivel colectivo. Se manejaron ambos con arrojo, sin miedo al escenario, fieles a sí mismos. Flick no retrasó ni un centímetro la línea defensiva pese a la presencia intimidante de Di María, Neymar y Mbappé. Tampoco atemperó la presión ni quiso contemporizar en ninguna situación, incluso con el marcador a favor en los instantes finales. El PSG también jugó con la misma osadía. Tan dependiente otras veces de las individualidades, el conjunto parisino se aplicó y compensó su inferioridad grupal con un trabajo esforzado sin balón, ideas claras y diente en las transiciones, pero le falló la pegada de sus estrellas.

Tuchel buscó al Bayern de dos formas distintas y no se puede decir que no tuviera éxito. Con una presión avanzada, bien escalonada, ensució la salida bávara de inicio y desconectó su fluidez. Si el Bayern lograba saltar ese primer empuje, el PSG se ajustaba en un bloque medio y dejaba descolgado al tridente ofensivo para atacar la espalda de Kimmich y Davies en caso de recuperación. En toda la secuencia tuvo un peso mayúsculo Ander Herrera, extraordinario hasta que Tuchel le quitó. El español enseñó su despliegue, equilibró la presión, auxilió a Kehrer y regaló dos pases de gol a Di María y Mbappé. Su actuación condensó el manual de cualidades de un centrocampista. Desde su liderazgo en la medular, el PSG se aproximó a lo que quería y encontró a Neymar (36 pases recibidos), pero en el área siempre se nubló.

El acento español del partido no se acotó a Ander Herrera. La final fue de Thiago. El medio centro del Bayern resultó fundamental para que el Bayern capeara los mejores minutos del PSG, se enchufara al partido y hallara el modo de ganarlo. Su criterio y precisión en la salida para llevar la manija (75 entregas buenas) hundió poco a poco al PSG y dispuso a su equipo en el camino de la victoria. Recibió, creó y lanzó con balones a las bandas o a la espalda de los interiores del PSG. Todo en uno para un Bayern que se alzó una vez más en Europa. El PSG tiene que esperar.

Momento clave

Ampliar

Thiago marca el ritmo y ve a Kimmich desmarcado en zonas interiores. Paredes pierde al lateral al tener que acercarse al medio porque Marquinhos salta a la presión. Es el inicio del gol. El hispanobrasileño fue clave.