Decía Thomas Fuller, clérigo e historiador británico, que "todo es muy difícil antes de ser sencillo". En este caso, el tenis nunca deja de ser difícil, aunque dentro de la dificultad que entraña este deporte, podemos comprobar que hay algunos golpes que son especialmente complicados de realizar con éxito.

Lo normal es que los tiros más recurrentes sean los que mejor dominemos y los que menos complicación requieran. Sin embargo, existen ciertos recursos que vamos a necesitar en situaciones de emergencia y cuya ejecución va a demandar grandes dosis de habilidad y toque en tu muñeca. A continuación, vamos a ver algunos de los golpes más complicados de ejecutar en una pista de tenis.

Bucharest backfire

El extenista rumano Ilie Nastase introdujo este revolucionario golpe en el mundo del tenis en la década de los setenta. Es un recurso que utilizaremos cuando un globo nos sobrepase y tengamos que correr hacia atrás para efectuar un golpe de emergencia. Para ello, adoptaremos una empuñadura continental, correremos hacia la línea de fondo e impactaremos la bola de espaldas a la red, lanzando la raqueta por encima del hombro no dominante.

Gran Willy

Como ya comentamos hace un par de años en un artículo dedicado a este golpe, el Gran Willy es un recurso que emplearemos cuando un globo nos supere en una subida a la red. Este golpe consiste en impactar la bola entre las piernas, de espaldas a la red, utilizando preferentemente una empuñadura semi-oeste.

Dejada con retorno

La dejada con retorno, como su propio nombre indica, es una dejada ejecutada de tal forma que bota en el campo contrario y vuelve a nuestro lado de la pista. Es un golpe que exige una gran destreza y control y suele realizarse con la dejada de revés, aprovechando un tiro potente del rival para bloquear la pelota y generar un gran efecto de retroceso. Además de ejecutar bien el bloqueo para que la pelota coja mucho backspin, necesitamos bastante tacto con la muñeca para que la bola aterrice muy cerca de la red.

Banana shot

Éste es uno de los golpes característicos de Rafa Nadal. Como ya comentamos en la publicación titulada ¿Cuáles son las claves del famoso banana shot?, es un recurso muy llamativo que utilizamos para contraatacar en una situación de desventaja por el lado de nuestra derecha. Para efectuarlo, es conveniente ir en carrera para aprovechar nuestra energía cinética en el golpe y conseguir una derecha fuera-dentro que suele ser ganadora. La idea consiste en cepillar la pelota de tal forma que rote más en el eje vertical que en el horizontal para que coja ese efecto parabólico lateral tan peculiar.

Remate de revés

Los remates, ya de por sí, no son golpes sencillos, sobre todo cuando impactamos la pelota sin dejar que bote. Por el lado de revés, la situación se complica más aún, porque en el momento del impacto estaremos prácticamente de espaldas a la red. Para ejecutar este golpe, agarraremos la raqueta con empuñadura continental y soltaremos un muñecazo hacia atrás y hacia abajo, con el objetivo de que la pelota no se nos vaya demasiado larga y coja un buen ángulo.