Radomir Antic hizo historia en el Atlético. El equipo que ganó el doblete devolvió la ilusión a una hinchada que estaba deprimida por las agónicas temporadas anteriores. Pero llegó Radomir y conjuntó un equipo que se convirtió en leyenda del Atlético. Un equipo de futbolistas fichados de uno y otro lado, sin apenas nombre. Liderado por Pantic, un auténtico desconocido para todos. Hizo un fútbol bonito, vistoso, alegre, le gustaba que la gente elogiara la manera de jugar de su Atleti. Ese equipo empezó a la sombra de los grandes, comenzó a ganar, siguió ganando y al final se llevó el título liguero. Molina, Geli, Santi, Solozábal, Toni; Vizcaíno, Caminero, Pantic, Simeone; Penev y Kiko. Pocos olvidan ese once que dio tantas alegrías al Atlético, que volvió a ganar el campeonato después de muchos años.Y también la Copa, en una final de infarto en Zaragoza.
En cierta medida, Antic fue un pionero en el Atlético. Se hicieron famosas sus jornadas de convivencia en el club, donde todos se juntaban un día a la semana alrededor de unos refrescos y unas cervezas en el restaurante rojiblanco, que estaba en la zona noble del estadio madrileño. Era otro tiempo, otro fútbol, otras costumbres. El propio Antic invitaba a los periodistas a participar en aquellos encuentros, donde de verdad se formó el equipo del doblete. Allí Radomir exponía sus fútbol, sin escondrijos. Nadie podrá olvidar a esos jugadores subidos a Neptuno celebrando el título. Y Radomir disfrutó como el que más. Luego vivió otra etapa en el club. Pero donde de verdad se ganó el corazón de la gente del Atlético fue con su mágico equipo del doblete. Adiós Radomir. Nunca te olvidaremos.