Somos algunos los que nos juntamos en un chat del "senado rojiblanco" y diferimos sobre la posición de João Félix en el terreno de juego. Algunos, igual que hemos leído al Cholo, lo prefieren en banda derecha, metiéndose por dentro en ataque y teniendo libertad para llegar por sorpresa y aprovechar el don de definir, sobre todo gracias a su lectura a la hora de llegar a tiempo a zonas de influencia. Para mí, el portugués suma más jugando con libertad detrás del punta, apareciendo en línea de pases y, con un solo control, facilitando asistencia y acompañamiento. Aquí son esporádicos, en un vídeo de seis minutos con el Benfica demuestra que está capacitado para hacerlo.

De cara al partido de Anfield ilusiona verlo con esa continuidad y esos ofrecimientos ante un buen equipo como el Sevilla. Con el Menino te pasa que estás deseando que toque la pelota para conocerlo mejor, sus detalles siempre te dejan con ganas de más. Ante los de Lopetegui fue de lo más destacado, en un primer tiempo donde se repitieron en ambos conjuntos errores de basculación (gol de De Jong), con precipitación de Trippier cuando Ocampos estaba de espalda. Fue un ejemplo de la temporada de “adaptransicion” que estamos viviendo. Un equipo que está mudando la piel y que en partidos de tronío todavía no sacó las garras. Se perdió fiabilidad en ambas áreas, señales de identidad de los equipos del Cholo. Que es cierto que por físico, empuje y ambición con los cambios, merecieron algo más en el segundo tiempo. Es con lo que nos tenemos que quedar de cara al partido del Liverpool, con competir como se hizo en la segunda parte y que el Menino aparezca lo suficiente para ir conociéndolo mejor. En Anfield hay que marcar y los de Klopp, con su presión en campo contrario, siempre te dan alguna concesión una vez que la rompas. Y se me hace indispensable el jugador que tenga rapidez, precisión y toma de decisiones para llevar esas contras.