Buen juego. Muchas veces hemos criticado el pobre juego del Atlético. Los rojiblancos han realizado encuentros muy flojos y ahora llevan varios partidos a un nivel muy alto. El equipo madrileño ya disputó un partidazo frente al Valencia, rindió de una manera extraordinaria ante el Liverpool y contra el Villarreal también desplegó un buen juego e hizo un partido muy completo. No lo tuvo sencillo, ya que el Villarreal se puso por delante y tuvo que remontar. El Atlético ha ido creciendo en estas últimas jornadas y ha redondeado una semana muy buena, con la victoria en Champions y estos tres puntos ligueros. El equipo de Simeone es tercero y ocupa el puesto que busca desde hace tiempo. Entrar en Liga de Campeones se ha puesto muy complicado, pero si el Atlético sigue así lo podrá conseguir. El conjunto ha recuperado su faceta goleadora y vuelve a marcar goles. Dos en Mestalla, uno ante el Liverpool y tres en este nuevo choque liguero. El gran problema rojiblanco durante gran parte de la campaña fue que no veía puerta. Marcaron Correa, Koke y João Félix, quien volvió a jugar con la camiseta rojiblanca. El Atlético va a más y completó su semana más feliz desde que comenzó la temporada.
Jugadores. Simeone recupera jugadores y esto también se nota. Frente al Villarreal jugaron Trippier y João Félix, dos futbolistas que tienen que ser muy importantes en este equipo. Trippier se operó de pubalgia hace veinte días y ya está jugando. El inglés parece de otra pasta. Y el portugués reapareció y marcó gol. Lo necesitaba. João Félix es un jugador diferente y es positivo que esté para la recta final de la temporada. Todos deben aportar su granito para lo que resta de campaña. Ahora mismo la enfermería se ha vaciado, aunque todavía están en el dique seco Herrera y Lemar. Y Costa se quedó en la grada al notar problemas físicos. Pero no es de importancia. El reto en este Atlético es llegar al choque de Anfield con todos los jugadores recuperados y en su mejor estado de forma.
Correa. El partido se complicó mucho y fue Correa quien con su gol metió al Atlético en el partido. El argentino lleva cinco goles en el campeonato y seis asistencias y volvió a ser determinante. Correa se ha hecho casi imprescindible en el equipo. Unas veces jugando en punta, otras más atrasado, es sinónimo de buen rendimiento. Frente al Villarreal marcó en un gol de listo, de futbolista avispado, presto a aprovechar la mínima concesión de un defensa.
Ayala. El Atlético rindió homenaje a un histórico, al Ratón Ayala, jugador que idolatraron muchos aficionados rojiblancos. Jugó 214 partidos con la camiseta rojiblanca, marcó 58 goles y conquistó una Liga, una Copa y una Intercontinental. Una leyenda del club que ha vivido momentos muy emotivos en este pasado fin de semana. Seguro que el Ratón se ha enorgullecido de lo que es ahora el Atlético. En su época compitió de tú a tú ante Real Madrid y Barcelona y ahora vuelve a suceder lo mismo. Ayala está encantado con este Atlético que es un grande de Europa.
Fiesta. El Atlético se siente fuerte en el Wanda Metropolitano. Ante el Villarreal, en un horario bastante complicado, acudieron 54.462 espectadores. La afición estaba deseosa de aplaudir a los suyos por el buen encuentro del martes. Se notó en la grada, en el ánimo de la gente. El Atlético, que parecía muerto hace pocas semanas, es ahora otro. Simeone vio desde un palco este triunfo tan necesario y fue Germán Burgos quien dirigió desde el banquillo. Lo dicho, el Atlético recupera la sonrisa. Y ha vivido su semana más bonita de esta temporada que aún puede deparar muchas alegrías.