Los sucesores de Froome

Remco Evenepoel arrancó febrero con el triunfo en la general de la Vuelta a San Juan. Tiene 20 años. Justo una semana después, Tadej Pogacar, que ya despuntó en el podio de la pasada Vuelta a España, se adjudicó la Volta a la Comunitat Valenciana. Tiene 21 años. También en el plazo de una semana, Sergio Higuita conquistó el Tour de Colombia, tras haberse proclamado campeón de su país. Tiene 22 años. Y al día siguiente, Egan Bernal recibió el Premio Laureus a la Revelación por un glorioso 2019 en el que se coronó en el Tour de Francia. Tiene 23 años. Ha pasado una semana más y Evenepoel llega líder a la última etapa de la Vuelta al Algarve. Que el ciclismo actual ha adelantado mucho la edad de eclosión de los corredores no es ningún secreto. Es la nueva tendencia. Todavía queda por comprobar, como dijo Alberto Contador en una reciente entrevista en AS, cuánto tiempo serán luego capaces de dilatar su carrera. En cualquier caso, estos nombres se erigen ya sin complejos en firmes aspirantes a las grandes citas del calendario.

Eso no quiere decir que las quintas más maduras hayan dejado de ganar. Nairo Quintana se ha impuesto en el Mont Ventoux y en Eze; Richie Porte dominó el Down Under; Jakob Fuglsang rivaliza con Mikel Landa en Andalucía… Y las generaciones intermedias tampoco bajan la guardia, como demuestra el triunfo de Superman López en Malhao. Tiene 26 años. En otros tiempos hubiera sido joven. Este refrescado panorama coincide con el regreso de Chris Froome, este domingo en el UAE Tour, ocho meses después de su grave accidente. En su caso, la incógnita que sobrevuela el pelotón es si será capaz de volver a ser ciclista. Algo parecido ocurre con Tom Dumoulin, el hombre que parecía llamado a cortar la racha del británico. Mientras salen de sus agujeros, la sucesión ya está lista.