Exaltación txuri-urdin

Este domingo puede ser un gran día para toda la familia txuri-urdin. Otro más. ¡Menuda semana llevamos! No se nos puede olvidar de dónde venimos... y sobre todo, hacia donde vamos. La verdad es que a este ritmo van a terminar por colapsarse las consultas de cardiología de Guipúzcoa. Y es que son días no aptos para cardíacos. Hay tanto en juego... y claro, todo lo queremos ganar. Todos deseamos lo mejor de nuestra Real Sociedad. Y como le queremos tanto, le exigimos el máximo. Pero para exigir, hay que apoyar primero. Y eso no les va a faltar nunca a los jugadores. En medio del éxtasis por la Copa del Rey se han agotado las entradas para el derbi vasco contra el Athletic. Me parece impresionante.

Pero es que nadie quiere perderse un día que puede ser doblemente feliz. Porque primero nuestras chicas juegan otra final, esta vez la Supercopa contra el Barcelona, después de eliminar al Levante en semifinales. Y si el año pasado lograron lo imposible ganando la Copa de la Reina, ¿por qué no volver a creer en ellas? Se lo han ganado. Así que primero miraremos a Salamanca. Todo el Reale Arena lo va a hacer, porque en una maniobra acertadisima, el club donostiarra abrirá antes sus puertas para que la afición puede ver la final por las pantallas del videomarcador. Seguro que las jugadoras de Gonzalo Arconada notan el aliento de su gente desde tan lejos.

Y después, esperemos que con otra copa en las vitrinas, nos centraremos en el derbi vasco de la resaca. La que tenemos donostiarras y bilbaínos después de las emociones fuertes del jueves, eliminando de la Copa a Real Madrid y Barcelona. Da la sensación de que es el derbi que más despistados nos coge a todos de los últimos años. Es normal. Las semifinales de esta próxima semana son el primer paso para llegar a una gran final de Copa, y es inevitable que todos desviemos la mirada hacia el Mirandes y Granada. Porque a nadie nos importaría que este derbi vasco de Anoeta fuera sólo el ensayo general de una final de Copa vasca. Sería una señal fantástica. Y ese sí que sería el gran derbi vasco de la historia. Pero antes, por favor, ganemos, el de este domingo. Que también queremos ir a Europa, y se presume clave para ello. Y porque queremos vivir un día de inolvidable exaltación txuri-urdin. Todo lo que aguanten nuestros corazones.