Felipe ha sido el gran fichaje del Atlético para esta temporada. Lo piensa gran parte de la afición, muchos de sus compañeros y también los dirigentes del club rojiblanco. João Félix fue el fichaje más caro y también el más mediático, pero el defensa es el que está cuajando mejor rendimiento. Y no lo tenía sencillo, puesto que Felipe llegó con la difícil misión de hacer olvidar a Godín, un jugador que se convirtió en leyenda de la entidad del Wanda Metropolitano. Felipe empezó sin jugar, puesto que la pareja de centrales fueron Savic y Giménez, pero en cuanto cogió el puesto no lo ha soltado. El Atlético, pese al gran número de incorporaciones, sobre todo en la parte defensiva, sigue mostrando el mismo engranaje defensivo de siempre y es complicado hacerle un gol a Oblak.
Lo mejor de los Trippier, Felipe y Lodi (este último aún no ha llegado al rendimiento de los otros dos) es que parece que llevan mucho tiempo en el equipo rojiblanco, como si se supiesen de memoria lo que quiere Simeone en cada momento. Y sólo llevan media temporada en el Atlético. Felipe, callado y reservado fuera del campo, se ha ganado el respeto de una hinchada que apoya como ninguna, pero que también es muy exigente. Ojalá siga manteniendo este nivel. Si la zaga sigue así, el Atlético podrá optar a cosas muy importantes en esta campaña.