Sigue la maldición de los penaltis

Una pena. El Atlético cayó en los penaltis, como lo hizo en todas las veces anteriores que se jugó algo frente al Real Madrid. Pero no hay nada que objetar al partido del equipo rojiblanco. El Atlético se va de Yeda sin el trofeo, pero con la cabeza alta. Y me atrevo a decir que muy reforzado. Ganó al Barcelona y tuvo contra las cuerdas al Real Madrid. Los rojiblancos hicieron un enorme desgaste ante el conjunto azulgrana, pero lo dejaron todo en la final. El Atlético dispuso de ocasiones para marcar, Courtois salvó al Madrid en varias ocasiones y la pelota no quiso entrar de nuevo. Enhorabuena Atlético. Muchos daban como claro vencedor al Madrid en la final, pero los que pensaban así no conocen bien al Cholo y a sus futbolistas. Por cierto, seguro que todos los que elogian ahora a Fede Valverde por su entradón a Morata son los que hablaron del anti fútbol de Simeone, de la agresividad del equipo rojiblanco, del juego sucio, de las patadas... Me imagino lo que hubieran dicho si esas entrada hubiera sido al revés. Así es el fútbol, que cada lo ve como le interesa a sus colores.

Prórroga. En estos últimos años ha sido la quinta vez que una final entre los dos equipos madrileños se fue a la prórroga, lo que indica la igualdad existente entre ambos conjuntos. La Copa de 2013 que se llevó el Atlético, las dos finales de Champions que ganó el Madrid y la final de la Supercopa de Europa que se adjudicó el Atlético en Tallin. Y ahora la de Yeda. El Atlético ha logrado llevar a su gran rival al límite. Puedes ganar o perder, pero está claro que el equipo madrileño, de la mano del Cholo ha sabido competir el derbi madrileño en partidos con títulos en juego.

Penaltis. Con anterioridad en cuatro ocasiones se había dilucidado una eliminatoria entre ambos equipos desde el punto de penalti. Tres en Copa del Rey y una en Champions. En todas ganó el Madrid. El Atlético nunca ha tenido una relación bonita con los penaltis. Además de los de las finales ante el Madrid, recuerdo algunos especialmente dolorosos. Uno que dolió como pocos a una generación entera de seguidores del Atlético: el de Esnáider ante el Ajax con un equipo lanzado en busca de la Champions. O el que falló Hasselbaink en Oviedo y que supuso el descenso a los infiernos. Los penaltis y el Atlético. Mala combinación.

Detalle. Diego Costa y Lemar fueron en la mañana del partido a Yeda para estar junto al resto de sus compañeros. No pudieron jugar la final por lesión, pero estuvieron con el resto del equipo en un momento tan importante. Un buen detalle y algo que habla bien a las claras de lo que es un equipo. A los dos aún les queda tiempo para volver a jugar, pero hasta entonces cualquier apoyo es poco en este tipo de partidos. Sufrieron en la grada, lo mismo que Koke, que no aguantó más y saltó al terreno de juego.

Eibar. El Atlético tiene que centrarse ahora en el encuentro ante el Eibar. Vuelve LaLiga y los rojiblancos parten con cinco puntos de desventaja con respecto a Barcelona y Real Madrid. Parece mucho pero el Atlético va de menos a más y la idea es pelear el título liguero hasta el final. En tres jornadas el equipo del Cholo visitará el Bernabéu, pero hasta entonces aguardan Eibar y Leganés. Y esos son seis puntos muy golosos. Me preocupa el desgaste que pueda dejar este torneo, porque la plantilla es corta y hay muchos futbolistas tocados. Pero hay que seguir luchando. La vida es una pelea y el Atlético lo entiende así mejor que nadie. Para todos los atléticos apesadumbrados, ahora más que nunca, ¡Aúpa Atleti!