La leyenda cumple hoy, 20 de noviembre, 91 años. Hablo de Pedro Ferrándiz, maestro de maestros, un adelantado a su tiempo, el genio por el que muchos chavales nos interesamos por el baloncesto. Su baja estatura hizo creer a algunos que eso le impediría imponerse en un mundo donde los gigantes son los que tienen la última palabra. Pero con Pedro eso nunca funcionó. En su Madrid imperial, el de Santiago Bernabéu y Raimundo Saporta, su palabra era ley.

Así llegaron 4 Copas de Europa y añadan 12 Ligas y 11 Copas de España. Ferrándiz tiene aura, carisma y es astuto. Muy astuto. Algunos pensarán que su gran orgullo es formar parte del Hall of Fame, que un pabellón en su amada Alicante lleve su nombre, tener una Fundación, su mítica Autocanasta, o tener el Collar de la Orden Olímpica del COI. No. El verdadero orgullo que a Pedro Ferrándiz le llegó al alma es haber sido designado como Socio de Honor del Real Madrid. Un club selecto para los madridistas de verdad (Del Bosque y Rafa Nadal están en el mismo), los que han engrandecido y dado brillo a este escudo sagrado. Ferrándiz tiene 91 años y ha dejado huella. En vida. Otro lujo sólo al alcance de los ELEGIDOS. Pedro lo es. Con Mayúsculas.