El running nos trae un mensaje

Correr está de moda. Llámalo running. Se ha demostrado, una vez más, con los ecos del fin de semana. La gesta de Eliud Kipchoge, que bajó de dos horas en la distancia de maratón, y el récord mundial de Brigid Kosgei en la misma disciplina han generado admiración y debate. Las zapatillas voladoras Nike Vaporfly se agotan en las tiendas deportivas, mientras que sus competidores de Adidas se exprimen la sesera en busca de un contraataque. El mercado de los runners es jugoso, los atletas populares inundan las carreras cada fin de semana. Todos ellos quieren la última tecnología en sus pies, igual que los cicloturistas no reparan en gastos para adquirir las bicicletas más punteras.

Las famosas zapatillas fueron el principal tema de conversación este miércoles en la redacción de AS durante la presentación de la Liga Nacional de Running, que, bajo el patrocinio de Plátano de Canarias, reunirá en la próxima temporada 2020 a las principales medias maratones de España: Sevilla, Barcelona, Madrid y Valencia, más la tradicional Behobia-San Sebastián.

Los corrillos de este tipo de actos se alimentan de la actualidad. Por eso también fue inevitable que surgieran los sucesos de Cataluña. El organizador de la Mitja de Barcelona, Jordi Vilapuig, insigne exjugador de hockey patines, llegó tarde debido a las movilizaciones. Y lo hizo con un mensaje de unidad que invitaba a la reflexión: “Aquí estamos cinco carreras de cinco ciudades y de cinco autonomías diferentes, con cinco promotores distintos, y sin embargo hemos encontrado puntos comunes para llegar a una alianza. El running une”. La Liga Nacional, efectivamente, hará más fuertes a las cinco pruebas populares. Y, en consecuencia, al atletismo y al deporte. La presentación, por cierto, se celebró en la Sala de Encuentros. Por si el nombre también sirve de inspiración.