Sabor a triunfo. El Atlético no pudo comenzar con victoria su debut este año en Champions, pero el punto le sabe a gloria. Fue perdiendo 0-2 ante una Juventus potente y muy eficaz. Pero el equipo de Simeone nunca se rindió, empató el encuentro y estuvo cerca de ganarlo. Herrera, que no había jugado ni un minuto con la camiseta rojiblanca en el campeonato liguero, hizo el empate que desató la locura en un Wanda Metropolitano entregado como siempre a sus futbolistas. El partido tuvo de todo, con buena fase de fútbol del Atlético en el primer tiempo y con un final apoteósico. La Juventus se irá de Madrid pensando que dejó escapar una gran posibilidad de dar un golpe casi definitivo en el grupo. Para el Atlético el 2-2 supone rearmarse de moral. Esa fe inquebrantable que decía el tifo en los prolegómenos del encuentro le dio al equipo un punto de oro.
El estadio. El Atlético siempre había hecho valer el peso del Wanda Metropolitano. En Champions el equipo madrileño ha jugado ocho partidos delante de su afición y sólo ha ganado el Chelsea. El conjunto italiano, que dejó patente que es un equipo muy a tener en cuenta, estuvo cerca de llevarse el triunfo. Pero ya dijo Giménez en la entrevista en AS que en el estadio rojiblanco juegan con doce. El equipo nunca se dio por vencido y el público apretó lo suyo. Hasta el final, hasta el último segundo.
La defensa. El Atlético encajó dos goles ante el Eibar, ante la Real otro dos y frente a la Juventus sucedió lo mismo. No se puede ganar cuando encajas dos goles en cada partido. No es algo habitual ver al Atlético en estas circunstancias. El equipo rojiblanco ha conseguido sus grandes éxitos por la fortaleza que ha mostrado en la zaga, por la dificultad que los contrarios siempre han tenido en hacerle un gol. A lo mejor es cuestión de una racha pasajera, pero el equipo de Simeone tiene que recuperar esa sensación de que marcarle un gol era misión poco menos que imposible.
João Félix. Realizó una gran jugada en el primer tiempo en el que se marchó desde el medio campo con el balón y a punto estuvo de hacer gol. João Félix lleva mucho peligro cada vez que tiene la pelota, pero el gran problema hasta ahora es que ha aparecido a cuentagotas. Es joven y su adaptación al Atlético lleva un proceso, por lo que habrá que tener paciencia con él. El equipo tiene que buscar la manera de encontrarle más y el portugués de hacer valer su calidad y su talento.
Herrera. Debutó con la camiseta del Atlético en partido oficial y lo hizo todo bien. El mexicano mostró una facilidad pasmosa para controlar el balón, pasarlo con coherencia y subir al ataque. Y marcó el empate en una jugada a balón parado, donde entró con todo. Viendo estos minutos parece complicado entender que Herrera no haya gozado de más minutos hasta ahora. Su veteranía le puede venir muy bien al Atlético en este momento de la temporada donde pueden entrar dudas. Además, es un futbolista que contagia. Vitolo también saltó al terreno de juego en la recta final y fue, una vez más, un revulsivo para el equipo. Le dio otro aire al Atlético, más profundidad, más verticalidad...
LaLiga. Ahora hay que pensar en el torneo liguero y en el partido del Día de las Peñas ante el Celta, donde se registrará otro lleno en el estadio. El Atlético seguro que querrá resarcirse de su mala imagen ofrecida en San Sebastián. El empate le dará al equipo madrileño mucha moral y fe en el trabajo que tiene por delante. El Atlético tuvo coraje, corazón y a Herrera. ¡Viva México!