La lesión en el aductor de Modric, la enésima muscular que sufre el equipo en un verano para el olvido, ha revelado otro problema que se veía venir. Para colmo se ha añadido también la lesión de Fede Valverde, que ha llegado tocado de sus partidos con Uruguay. La planificación deportiva ha sido un disparate si nos aferramos sólo a la línea de centrocampistas. Zidane ha sido el hombre empeñado en adelgazar de forma temeraria la zona de la Sala de Máquinas con tal de reforzar su apuesta unidireccional por el fichaje de Pogba. Pero Pogba no vino, así lo decidió el United, y a cambio se fueron tres jugadores a los que Zizou puso la cruz y que habrían dado un fondo de armario clave para luchar ahora por todas las competiciones en juego (Champions, Liga, Copa del Rey y Supercopa de España). Me refiero a Marcos Llorente, Ceballos y Kovacic. El primero reforzó a un enemigo directo, el Atleti del Cholo, y dejó en caja 30 millones de euros (pocos me parecen si es el Atleti al que se lo vendes). El utrerano triunfa en el Arsenal de Emery (al menos está cedido y regresará en junio de 2020). Y el croata fue traspasado al Chelsea dado que Zidane no quería volver a verle por Valdebebas. Tres jugadores que tanto a nivel individual como colectivo siempre suman.

Al haberse ido todos ellos por decisión de Zinedine, la línea del centro del campo ha quedado reducida a sólo cuatro jugadores puros de esa demarcación (Casemiro, Kroos, Modric y Valverde), lo que ha obligado a resetear a James e Isco para que jueguen más retrasados que en esa posición idónea para ellos de mediapunta. Al lesionarse Modric y Valverde, y estar también lesionado Isco, resulta que para el partido de este sábado con el Levante sólo están disponibles y frescos dos jugadores: Kroos y James. Ello obligará a Zidane a tirar de Casemiro, pese a que ha llegado de los últimos después del Virus FIFA y sólo ha podido hacer un entrenamiento este viernes para preparar la visita del peligroso Levante. Así estamos por culpa de la mala planificación y más a cuatro días del partidazo de París ante el PSG. Más nos vale que este sábado las lesiones nos respeten ante los granotas en el Bernabéu. Por lo pronto, ni Modric ni Isco ni Valverde podrán estar en el Parque de los Príncipes. Zizou creyó que esto nunca ocurriría. Pero es la Ley de Murphy. Al final, lo que tiene que pasar… pasa.