El Getafe será un hueso muy duro de roer para el Madrid
Un Getafe muy intenso y organizado. José Bordalás está llevando al Getafe a cotas insospechadas. A falta de cinco jornadas por disputarse ocupa nada más y nada menos que puesto de Champions. La temporada ya es de matrícula de honor, pero si consigue quedar entre los cuatro primeros clasificados de La Liga será una de las grandes gestas colectivas del curso 18/19 en el panorama futbolístico europeo. Un fútbol desde la perfecta organización, el compromiso, la intensidad y defender con mucha agresividad en campo contrario les ha llevado al éxito.
Salir de la presión del Getafe. Para esta temporada Bordalás le ha dado al equipo un nuevo impulso a la hora de ir a buscar al oponente a campo contrario. Quiere robar en zonas cercanas a la portería rival y lo hace con una agresividad, un orden y una fe tremendas. Son especialistas en ahogarte en cuanto el balón llega a una de las bandas, una vez allí es tarea compleja el poder sacar la pelota de esa zona y conseguir girar el juego hacia el lado contrario. Una de las claves para el Real Madrid será la agilidad en el pase y no dar demasiados toques por jugador en zona de iniciación y construcción del juego, así como no abusar de conducciones, que son presas fáciles a la hora de ser presionadas.
Triángulo de Casemiro con los centrales. El gran peligro del Getafe está en sus hombres de ataque. La temporada de Jorge Molina, de Mata y de Ángel es excepcional y juegue quien juegue lo hace con un gran rendimiento. Incluso les hemos visto jugando los tres juntos, siendo Jaime Mata el que se tira a un costado, pero llegando igualmente con gran peligro al área rival desde segunda línea. Por todo esto será vital que Casemiro mantenga en todo momento poca distancia en relación a los centrales, evitando que se queden en igualdad numérica contra los atacantes del Getafe que se manejan de maravilla a la hora de descolgarse y atacar los espacios simultáneamente.
La baja de Djené. El factor fundamental que permite al Getafe irte a buscar a campo contrario y que no le importe el hecho de dejar muchos metros entre su línea defensiva y su portero es la velocidad de Djené. El defensor togolés es un auténtico portento físico y posee una gran capacidad intuitiva, lo que le permite llegar a cualquier ayuda y corregir cualquier error el compañero. Su baja condiciona mucho esta manera de jugar y puede permitir al Real Madrid buscar los espacios a la espalda de la defensa getafense con mas garantía de éxito.