El contraataque de Guedes y la vía de entrada para el Atleti

En el camino del Atlético de alargar la Liga se interpone un Valencia en alza. Recuperado el gol, se olvidó de su complicado inicio de temporada. Se ha impuesto la realidad con el equipo de Marcelino, ordenado como siempre atrás (sólo 28 goles encajados), con futbolistas de alto nivel técnico y opciones ofensivas variadas. Nunca dejó de competir. El sólido 4-4-2 de Marcelino, que apenas deja resquicios entre líneas, le sostuvo y le sostiene. El Atleti necesitará mover el balón con velocidad para girar la defensa del Valencia, bien protegida en las bandas. A la espalda de Parejo y Coquelin, en ese espacio entre la medular y los centrales, es donde más sufre. Los apoyos por dentro de Koke, Lemar, Griezmann o el mismo Morata, que ejecutó movimientos de mucha eficacia contra el Eibar, podrían desorganizar su estructura. En la primera parte del ya lejano duelo previo de Mestalla, uno de los mejores momentos del Atleti este curso, Simeone utilizó este recurso con Correa, Lemar y Griezmann y encontró los puntos débiles de los de Marcelino.

El impulso actual del Valencia se asocia, en gran medida, a su lucidez en el juego de transición. Pocos equipos tienen su poderío en los contraataques (16 por partido). Si el Atleti se descompone en la presión, el Valencia se estirará con rapidez como hizo ante el Madrid o el Betis en la pasada jornada. Aunque la ausencia de Rodrigo le debilita, futbolista clave como paso intermedio en la generación de la jugada (35 pases recibidos en el Villamarín), los de Marcelino dispondrán de la claridad en el toque de Parejo, la velocidad de Gameiro, el dinamismo de Soler y las arrancadas de Guedes, dificilísimo de sujetar en espacios abiertos. Cuando tenga la posesión, el Atleti tendrá que tener presente el peligro que se le avecina tras pérdida en caso de que no esté bien posicionado sobre el campo. Simeone insiste siempre en la diferente altura de los pivotes, Rodrigo y Saúl a priori esta tarde, para contener los envíos verticales de los rivales. Minimizar la incidencia de Parejo será determinante para el bloque rojiblanco. Además, el lateral de la banda en la que no esté el balón deberá estar atento en la vigilancia.

El estado de forma de Guedes y la profundidad de Gayá convierten en una verdadera amenaza al costado izquierdo del Valencia. Aunque haga de delantero como ante el Betis hasta la la lesión de Cheryshev, la tendencia del portugués le llevará a situarse en ese perfil. Las diagonales de Guedes, notable encarador (cuatro regates por encuentro), exigen siempre la atención de los centrocampistas. Es un futbolista capacitado para desnivelar un duelo de altura como es este Atleti-Valencia.

Vigilar el lado débil

El Valencia explota los cambios de orientación. El Villarreal no los toleró en la Europa League. Gayá sacó provecho de la frágil posición defensiva de Chukwueze. El Atleti podría afrontar un problema similar si bascula de forma exagerada.