La fiesta del Wanda y la guinda del Mundial

El fútbol femenino no para de romper barreras. Barreras que hace una década parecían inalcanzables. España ha dado un paso adelante en el fútbol femenino. Por fin la sociedad ha descubierto una ventana que difícilmente volverá a cerrarse. Más de 60.000 personas se reunieron en el Wanda Metropolitano para ver el Atleti-Barcelona. El mejor choque de la Liga Iberdrola, un escaparate único para un deporte que no para de crecer. Un momento inolvidable.

Fue una fiesta. Para niños y abuelos. Para rojiblancos y para aficionados al fútbol en general. En vez de Oblak, Griezmann, Luis Suárez o Messi sonaron los nombres de Losada, Torrejón, Meseguer y Jenni Hermoso. Futbolistas que ya son conocidas por sus méritos y su esfuerzo de años en la sombra. Las que vienen por detrás se fijan en ellas y eso hace que la aureola aumente. El futuro está asegurado.

La guinda a este crecimiento imparable llegará en verano, cuando España dispute el Mundial de Francia. Muchas de las que llenaron el Wanda estarán allí y unirán a todo un país en busca de la gesta de hacer un buen papel mundialista. Se esperan audiencias nunca antes vividas en encuentros femeninos en España. Hay licencia para soñar. Ver repleto el Wanda en un partido de chicas es otro ejemplo. No fue un Atleti-Juve de Champions masculino; fue un duelo entre las mejores futbolistas de nuestro país. Las nuevas estrellas de España.