Vuelve la 'Felizidane'

Cuando Pedrerol soltó a las tres de la tarde en Jugones eso de "Zinedine Zidane vuelve al Madrid. Es el elegido", reconozco que me entró una sensación de gozo difícil de explicar. Fue como soñar con que te toque la Bonoloto sin haber comprado el boleto. No les voy a engañar, daba por imposible que ahora regresase el ‘Señor de las 5 Champions’ (jugador estrella en la Novena, técnico ayudante en la Décima y entrenador de las tres consecutivas que han hecho historia).

Cuando Zizou dijo adiós días después de ganar la Tredécima en Kiev considerábamos que tardaríamos en volver a verle por el Bernabéu, aunque ésta sea su casa. Zidane no es un hombre impulsivo, no es un frívolo. Creíamos que una decisión tan firme tendría larga fecha de caducidad, pero su lealtad hacia este escudo ha quedado demostrada una vez más. Cuando al marsellés le han dicho: “Zizou, estamos en alerta roja, te necesitamos”, ha dicho “oui” asumiendo el alto peaje que podría pagar si no iguala lo que ya de por sí parece inalcanzable. 

Con ZZ regresa la ‘felizidane’, la sonrisa de la Champions, el mejor director de Recursos Humanos, el hombre que seduce, no impone, el amigo de los jugadores, su hermano mayor, su segundo padre, su ídolo de juventud, su todo… Zidane tenía una autoridad moral en el vestuario que permitió entender mejor este trienio inolvidable dibujado en las noches mágicas de Milán, Cardiff y Kiev.

La alternativa era Mourinho. No hay color. Con Mou habría regresado la caza de brujas, el cobro de facturas con los jugadores que tenía cuentas pendientes (por la puerta por la que hubiese entrado Mou habría salido Sergio Ramos) y las comparecencias agrias y malhumoradas. Soñemos con Zizou por recuperar el estilo, la alegría y el orgullo de sentirse madridista. Zizou ha vuelto. Larga vida a Zinedine.